Capítulo 3. "Malas decisiones"

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Me empiezo a alistar para verme con Alex, pero no logro sacar de mi cabeza aquel sueño, no sé porque me afecta tanto.

-Ya deja de pensar en eso se te hará tarde.- me digo a mí mismo.

Salgo tan apresurado como puedo, olvidé avisarle a mi mamá que ya me iba, pero no podía hacerlo esperar, era de las pocas cosas que le disgustaban mucho.

Ahí estaba esperándome, en aquel lugar donde nos vimos por primera vez, solo sonríe cuando me ve.

Estoy algo alterado y veo que lo nota.

-¿Qué pasa? ¿Todo bien?- me pregunta mientras caminamos hacia el restaurante.

-Sí, estoy bien.- le respondí de una manera seca y cortante.

Ya estando en el restaurante me tranquilicé un poco y le pedí disculpas por mi comportamiento.

-No te preocupes.- me dijo sonriendo.

Terminamos de comer y decidimos quedarnos un poco más para platicar sobre sus estudios, hace mucho que no le preguntaba por ellos.

Estaba en segundo año de carrera, era un poco estresante me contó, pero logró pasar de año.

Recibo una llamada, de mi madre, seguro es para regañarme porque me vine sin avisar.

Decido no contestar y pongo el celular en silencio, estaba pasando un muy buen rato y no quería que nada me distrajera.

Comenzamos a contar chistes muy poco chistosos, valga la redundancia, pero nos reíamos porque estábamos ahí, los dos, compartiendo un momento.

Me despedí, ya se estaba haciendo tarde.

Recordé aquel sueño, estaba a punto de decircelo pero cuando voltee con él, estaba sonriendo, se veía feliz, no quería arruinar eso.

Voy en camino a casa y checo el celular, tenía cuatro llamadas perdidas de mi madre, al llegar a casa esto se iba a poner feo, pensé.

No me equivoqué, al entrar por la puerta veo que mi madre está llorando, le pregunto que está pasando.

-Tu abuelo falleció.- dijo ya más tranquila.

-Pero...- no terminaba de asimilar aquellas palabras.

Un corazón en peligroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora