Inmortal (Tom Riddle - Lord Voldemort)

Capítulo 5

Kaitlyn caminaba a par de sus amigas y el chico que cayó de su escoba a mitad de partido ¿Su nombre? Jamie Cooper. Los cuatro se habían hecho buenos amigos. Kaitlyn había ganado puntos por valentía para su casa. Tom le guardaba cierto no desprecio pero, en cuanto a sus amigos, le parecía algo absurdo que alguien como ella se juntara con un montón de sangre sucia.

En cambio los chicos que siempre estaban con Riddle eran magos puros, de familias prestigiosas. Entre ellos Lucius Malfoy, Orion Black y Rodolphus Lestrange (Rodo). Quienes seguían en todo a Riddle, obteniendo en beneficio una ligera tiranía en el colegio. Sin embargo, a estos chicos les gustaba pasar tiempo con las amigas de la ojiverde. Un día organizaron una quedada para pasar el rato.

—¿A quién se le ocurre pasar el día con esos sujetos?—. Riddle rueda los ojos—.
—Vamos Tom, por nuestro amigo Malfoy—. Orion lo alienta—.
—Deberías salir con una Slytherin a mi parecer, claro—. Rodo mira al albino—.
—Solo quiero saber si hay oportunidad o no—.
—Malfoy por supuesto que la hay, ¿Ya investigaste a su familia? Definitivamente dirán que sí—. Riddle bufa—. Si se casan no me pidas ser testigo—.
—Okey, pero no es nada serio, solo déjenme pasar el rato con ella—.
—No confirmo mi asistencia, me rehuso—. Riddle les deja en claro y se retira—.

El chico sale a caminar por la pradera en dirección al lago. Le gustaba pasar tiempo en la naturaleza. Por supuesto no con el clima húmedo. Odiaba que el lodo manchara sus zapatos y la brisa humectara su cabello perfecto. Cosa que para su suerte era así esa tarde.

Se recarga bajo un árbol y espera pacientemente a que pase aquella nube con lluvia. A su vista del lago se posa una Kaitlyn disfrutando mojarse con la lluvia.

La chica comienza a quitar su capa, a soltar su cabello, dejar sus zapatos y calcetines a un lado. Riddle observa eso poco a poco y cae en cuenta de que eso era muy personal, la bruja se estaba desvistiendo.

El pelinegro mira el cielo, estaba más fuerte aquél diluvio, no se iba a ir ahora. Bufa estando frustrado y da la vuelta al árbol para tener fuera de su vista a Kaitlyn.

Deja pasar veinte minutos y vuelve a dar la vuelta al árbol. Mira a la chica sentada en una gran roca. Estaba de espaldas y podía ver su cabello escurrir sobre su piel blanca. Su cabello era tan largo que cubría la mayor parte de su espalda.

Su ropa interior en conjunto era color negro. La chica estaba realmente concentrada mirando el lago. Cierra sus ojos respirando su paz.

Riddle estaba encantado de ver lunares en su cuello, o lo brillantes que sus aretes húmedos se veían. Una bruja muy linda.

La chica abre los ojos y toma un libro de su costado. Pero un instinto hace que voltee hacia atrás. Y mira a Riddle bajo un árbol no tan lejano, el chico con sus brazos cruzados y vestido de negro le hizo tragar de nerviosismo pero no un nerviosismo malo, uno que nunca se había presentado en su ser. La chica sonríe un poco hacía el pelinegro pero este no sabía cómo comportarse, es decir, la chica estaba semidesnuda ahí y él allá. Lo sacó completamente de sus cabales.

Aceptar que ya la había visto desde que llegó o actuar como si se acabase de dar cuenta. En un abrir y cerrar de ojos Tom le mira vestida de negro. La chica había decidió vestirse con un hechizo. El chico mira el cielo una vez más, la lluvia había parado.

—¿Estoy castigada?—. de un momento a otro la tenía enfrente—.
—¿Perdón?—. finge demencia—.
—Entonces es un no—. la chica guarda su libro en el bolso infinito—. Gracias por lo que hiciste la otra vez en el partido-. le mira a los ojos y medio sonríe, el chico se queda inmovil-.

Decide irse primero que él y el pelinegro realmente no quería aceptar que la vio. Pero tampoco quería seguir viéndola. Aunque seguía caminando detrás de ella, no paraba de recordar esa bella imágen en su mente.