El Rey De Los Ladrones (Ereri)

Capítulo 3

Eren regresaba al palacio donde su hermano lo esperaba para cenar, había sido un dia bastante pesado y solo quería descansar.

-¡Me dijeron que encontraste a uno de los ladrones que te atacaron!

-Si...era... una mujer.

-¿Una mujer? -Zeke empezó a reírse -Hermano, dudo que una mujer sea capaz de atacar a mis guardias y salir ilesa

-No debes hacer menos a las personas, no debes subestimar a tus enemigos por que puede ser una mujer o hasta un doncel.

-Por favor Eren, solo están para tener hijos y servirnos.

-¡Se me quitó el hambre! -Antes de que pudieran servir la comida, Eren se retiro a su habitacion molesto por la manera en la que de comportana Zeke, azotando la perta es como entro al recordar las palabras de su hermano -Habia olvidado lo idiota que es, detesto que hable asi de mujeres y donceles... ¡Es como si se refiriera a mi madre!

-El no ha cambiado-A su cuarto entraba a una anciana que cargaba una charola -En cambio tu si.

-¿Perdón? -Eren se acercó a la mujer -¿Nos conocemos?

-Supe que habías regresado -La mujer sonrió -Eres tan parecido a tu madre en muchos aspectos.

-¡Eres la dama de compañía de mi madre! -Eren recordaba aquella mujer que siempre había estado al lado de la reina.

-Me alegra que me recuerde joven Eren -La mujer depositó la charola cerca de la cama de Eren -Se que es difícil entender al rey.

-¡Zeke es un idiota! ¡Denigra a las mujeres y donceles, es de lo peor!

-Quisiera decir que me sorprende pero no, desde niño siempre fue así a causa de su abuelo.

-¿Qué sabe de los rebeldes? -Cuestionó Eren -¿De verdad son tan malos como dice Zeke?

-Solo puedo decir que las cosas no son lo que parecen mi principe, podrían decirte muchas cosas pero solo tu puedes elegir que cree.

-¿Zeke miente?

-Deberías ir a hablar con el padre Erwin, le alegrará verte de nuevo -La anciana se acercó a la puerta -El podra decirte todo lo que deseas saber, buenas noches.

-Buenas noches -La mujer salió para dejar solo a Eren -¿Zeke miente? Y si es así, ¿Por qué lo haría?

Al día siguiente, Eren salió rumbo a la ciudad con dirección a la catedral donde estaba el padre Erwin. Un hombre muy respetado y humanitario con todo el pueblo a quien se le recurre por ayuda. Si nadie le quería decir absolutamente nada de lo que estaba pasando por miedo o alguna otra razón, sabía que Erwin sería incapaz de mentirle.