- RESILIENCE / DARYL DIXON

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-buenos días, Rachel- hablo Rick, Kendall sonrió dejando el hacha de lado para seguidamente acercarse a abrazarlo y darle un beso en la mejilla.

-buenos días, dormilón, ¿descansaste?

-bastante.- respondió Rick despeinandola mientras comenzaba a caminar, esta le pego un manotazo riendo.

sonrió mientras lo veía ir a hablar con Lori y rodaba los ojos con diversión.

la rubia se encontraba afilando sus hachas

las cuales había encontrado en su primera ida a la ciudad junto a Glenn, y ya les había agarrado cariño.

eran dos hachas pequeñas con arnés, el cual se amarraba a la cadera y le servían para mucho.

no pasaron mas de tres minutos, cuando unos gritos de los niños la sacaron de su burbuja.

-¿¡Oliver!?, ¡¿Carl?!- gritó la mujer con desesperación antes de correr con ambas hachas en mano al igual que los demás al rededor. su hijo mayor, quien estaba arriba de la casa rodante, la siguió con rapidez cuando la vio correr

"¡mama, mama!" escuchaba de distintas vocecitas mientras ella y Lori gritaban los nombres de sus hijos al correr hacia los árboles.

-¡mis bebés!, ¡aquí estoy!- gritó kendall saltando sobre un arbusto en cuanto vio a los niños correr en su dirección.

sintió como todos los pequeños se le aventaron al ser la primera adulta que vieron, la mujer los tomó del rostro con rapidez a todos y luego de besar a su hijo y a su sobrino y que Lori y Jaquie llegaran, siguió a los demás que habían ido más adentro de los árboles.

con asco vio a un caminante devorar a un ciervo.

este no duró mucho entretenido al notar a todos los humanos a su alrededor.

los chicos comenzaron a golpearlo por todos lados hasta que Dale le cortó la cabeza con una hacha bastante más grande que las suyas.

recién se daba cuenta que había tirado las hachas cuando llegó Ellio a su lado, ofreciéndole ambas armas.

-gracias, cariño- respondió esta tomándolas nuevamente.

-es el primero que tenemos, nunca habían llegado tan lejos.- hablo Dale sorprendido.

-se abran quedado sin comida en la ciudad.- respondió Kendall, todos la vieron.

seguidamente dirigieron su mirada a unos arbustos, pues ruidos habían venido de ahí.

Kendall alejó a su hijo y se acercó quedando tras Shane.

Daryl salió de los arbustos viéndolos con indiferencia.

todos suspiraron.

-hijo de perra, ese es mi venado- exclamó el recién llegado.- lo arruinó todo este, ¡sucio, apestoso, estupido, hijo de perra!

-cálmate, hijo, no sirve de nada- habla Dale con calma, Daryl se acercó enojado a él

-¿y tu que sabes, anciano?, ¿por que no tomas tu estupido gorro y vuelves al geriátrico?

Kendall levantó una hacha frente al pecho de Daryl, quien dirigió su mirada a la rubia, la vio de arriba a abajo y se alejó hacia el ciervo.

Ellio jalo a su madre junto a él con rapidez.

-segui a este venado por kilómetros. lo llevaré al campamento y lo cocinaremos, ¿que les párese si le cortamos esta parte mordida?- pregunto el hombre señalando las partes.

-yo no me arriesgaría- hablo Shane

-es una lástima, atrapé unas ardillas, unas diez o doce; comeremos eso- siguió Daryl.