De repente, por la mente de Becky una alarma se encendió mientras parecía recordar algo. Caminando hacia la puerta que daba acceso al jardín, Becky la abrió y buscó a Bonbon.
- ¿Bonbon?- lo llamó.
Bonbon lloriqueó en forma de respuesta. Siguiendo su voz, Becky caminó y lo encontró detrás del árbol, escondido.
- Bonbon, ven aquí.- dijo Becky mientras palmeaba sus muslos, incitándolo a salir de su escondite. Bonbon asomó su pequeña cabecita a un lado del árbol, pero aun así no salió. Miro Becky a los ojos, como si estuviera tratando de hablarle con la mirada.- venga, Freen ya se fue.
Entonces Bonbon al fin salió. Caminó hacia ella tambaleándose. Becky se agachó y abrió los brazos para recibirlo y abrazarlo.
- Oh, mi pobre bebé.- dijo Becky, mientras lo mecía en sus brazos.- déjame ver...
Becky lo soltó y lo examinó para ver su había sufrido algún daño. Afortunadamente Freen no lo había golpeado tan fuerte como para romperle las costillas, pero si lo había traumado y lo más probable es que ahora lo pensaría dos veces antes de acercársele a Freen.
- Ya vas a ver que Freen tendrá su merecido. Yo misma me encargaré de pegarle después, ¿Vale?
Bonbon movió su colita y ladró en forma de aprobación. Becky sonrió mientras lo acariciaba. Conociendo a Freen desde hace años, sabía lo impulsiva que podía llegar a ser. Una vez en la escuela un niño la había llamado perra al no prestarle su tarea de Matemáticas, Freen lo había cogido de la camisa y lo levantó hasta que sus pies no pudieron tocar el suelo.
- Nadie la llama perra.- le había dicho Freen. Sus dientes estaban apretados mientras lo miraba con ira.- ¿Me escuchaste?
- S-si...- musitó él, con la cara llena de miedo.
Freen lo soltó mientras que el chico se estrelló contra el suelo. Aun Becky podía recordar la cara del chico en su mente. Desde ese día él no se le había vuelto a acercar y evitaba cualquier tipo de contacto con ella y Freen.
Sonrió mientras recordaba lo celosa que se había puesto una vez Freen cuando le contó que Amanda la había invitado al baile escolar que se realizaba cada año. Para Freen ella era intocable. Era suya. Su pequeña. Becky pensó en lo hermoso que hubiese sido tener una relación con ella en su adolescencia. Pero nunca se atrevió a revelarle los verdaderos sentimientos que sentía.
Con Freen había sido la persona con quien dio su primer beso. Pero fue gracias a una estupidez. Becky la había retado a que no se atrevía a besarla y cuando apenas se lo dijo, ya tenía los labios de Freen sobre los suyos. Se había avergonzado tanto que tuvieron que pasar días para que Becky no se sonrojara cada vez que la miraba sin que el recuerdo de aquel beso cruzara por su mente.
Aun así, el beso había sido fantástico.
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Te estaré vigilando | Freenbecky (G!P)
FanficBecky Armstrong no puede olvidar el sonido de la voz de las últimas palabras de Freen Sarocha, la mujer que alguna vez consideró introvertida con una personalidad naturalmente tímida ahora la describe como una malvada acosadora psicópata. Asustada y...