El poder de la observación

El verdadero Naruto Uzumaki

Unas horas después de haberse enfrentado al sanin de la serpiente el equipo 8 mas Karin tuvieron que refugiarse pues el ultimo ataque del Uzumaki no paso desapercibido para nadie por lo que era seguro que al verlos los atacarían y en su estado actual no tendrían oportunidad de defenderse por lo que tuvieron que esconderse y esperar que la tormenta pasara.

Afortunadamente pudieron encontrar un refugio en un árbol hueco bien oculto entre toda la fauna del bosque. 

Ahora mismo Hinata y Karin estaban atendiendo las heridas de los hombres.

Karin: Ya le esta bajando la fiebre- suspira mientras toca la frente de Naruto antes de remojar el paño y colocársela sobre su frente

Hinata: Eso es bueno- suspira aliviada mientras revisaba a Shino buscando cualquier otra herida que no haya visto antes

Mientras ambas chicas atendian a los hombres pasan a revisar a las invocaciones del Uzumaki. Pese a su apariencia poco intimidante los tres eran fuertes, de eso no había duda. Mientras atendían sus heridas Hinata constantemente echaba miradas fugases a su acompañante.

Hinata: Gracias...por todo, fuiste de gran ayuda a ya afuera, sino hubieras estado no se que hubiera hecho.

Karin: No me agradezcas, ustedes me ayudaron primero al salvarme de ese oso, además realmente no creo que ayude mucho, solo fui una batería como siempre lo eh sido.

Hinata: ¡No digas eso!, aunque reconozco que tus habilidades curativas ayudaron a contrarrestar el cansancio y el veneno, lograste empuñar la espada de Naruto-kun lo cual es un logro sin mencionar tus habilidades de sensor que nos permitió despistar a los otros equipos camino haca.

Hinata no quiere hacer sentir de menos a la pelirroja, y si le sirve de consuelo al menos ella hizo mas que todo el equipo 7.

Este comentario le causa gracia a la pelirroja quien cambia de tema ante la mención de aquel equipo.

Karin: Eso me recuerda, este equipo al que salvamos...¿los conoces?- pregunto con curiosidad

Hinata: Uff, desafortunadamente, fueron compañeros en la academia y desde que nos graduamos han sido como diría Naruto-kun, "una estaca en el culo"

Karin asintió de acuerdo, ella también se sentiría igual que ellos, de lo poco o nulo que pudo interactuar con esos tres en el poco tiempo podía decir sinceramente que no quería volver a verlos ni en pintura.

De lo que le contaba la Hyuga supo varias cosas. Primero, el Inuzuka era un machista mujeriego del cual se cree el Alfa y trata a las mujeres como si fueran objetos. Segundo, la Haruno ni siquiera debía ser Kunoichi, no mientras mantuviera esa actitud de fangirl y esa mentalidad de civil, por no hablar de su voz. Tercero, el Uchiha era sin duda el peor, esa actitud de vengador y niño mimado que cree puede exigir lo que sea solo causara puros problemas, ¡literalmente era un riesgo de fuga potencial!, pero por supuesto los altos cargos de la aldea que por cierto habían tenido mucho que ver en la actitud egocéntrica del Uchiha hacían que todo estaba bien pero no lo estaba.

Karin: Y yo creí que de por si Kusa era de lo peor, su aldea no se queda atrás...sin ofender.

Hinata: ¿Porque?, todos sabemos que Konoha no es tan inocente como parece, tiene sus defectos y no te culpo que pienses así, si tuviera que hacerte una lista de los que han abierto los ojos, aparte de nosotros estaría Kurenai-sensei, Asuma-sensei, Konohamari-chan y sus amigos, Hanabi y Natsu, todo el barrio rojo.

Karin: Entiendo, pensé que era la única que la pasaba mal en mi aldea pero aquí en Konoha pensé que los trataban distinto- murmuro viendo algunas cicatrices en la espalda del Uzumaki que no fueron hecho precisamente por Orochimaru