Capítulo 20: Temor infundido•

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Ava~

El crupier se prepara para repartir las cartas de nuevo. Es la segunda ronda que juegan desde que iniciaron mi padre, Dadvian y dos hombres más; mi padre ha ganado la primera y no ha dejado de soltar evasivas cuando Dadvian medio menciona a Nathan.

—¿Alguien más quiere apostar? —pregunta el crupier.

—No, yo me retiró, solo viene a pasar una velada tranquila por la fiesta y, termine apostando.

—De acuerdo, señor Jackson, es un placer tenerlo por aquí esta noche.

—Caballeros, no apuesten mucho.

El señor Jackson se retira y el juego continúa, mientras Lisa se encontraba apostando, por otro lado.

—Solo vas a jugar una vez más y nos largamos de aquí, papá —le digo 15 minutos después sin importarme lo que el crupier y el otro señor puedan llegar a pensar.

—Ava, querida, te escuchas preocupada —Lisa llega y se coloca detrás de mi padre y coloca sus manos en su pecho, mientras habla mantiene una sonrisa en su rostro—. ¿No confías en él?

—Lo que me preocupa es que sigan apostando. ¿Te imaginas que se le ocurra apostar algo relacionado con la empresa? Sería algo desastroso, ¿verdad padre?

—Pero no creo que eso ocurra, no creo que el señor Marcos llegue a ese tipo de apuestas —Lisa quita sus manos del pecho de mi padre, da un paso atrás y puedo distinguir cómo se muerde los labios con la furia brillante en su rostro por las palabras de Dadvian.

—Por lo visto te preocupas mucho por mis intereses hija.

—No lo creas padre, solo me preocupó por los míos propios.

Nadie más dijo nada, ninguno estábamos realmente pendientes del juego, solo el crupier y el otro jugador.

Lisa le susurra algo en el oído a mi padre y se va, la sigo hacía con la mirada, hasta verla perderse, supongo que hacia los baños. Dadvian me mira y asiente hacia mí, sabe lo que planeo hacer.

Después de esperar que todas las mujeres que estaban dentro del baño salieran, puse seguro a la puerta. Era hora de hablar a solas con Lisa.

—Vaya, estaba pensando en ti justo ahora —le digo cuando la veo salir del cubículo en el que estaba.

—Esperas que crea que estás aquí para recordar viejos tiempos y fingir que somos amigas.

—No, la hipocresía no es lo mío, eso te lo dejo a ti. Se te da muy bien.

—No tengo nada que hablar contigo, así que déjame salir.

—¿Por qué lo hiciste?

—¡Tú no lo entiendes! —su mirada se crispa.

—Confiaba en ti —le reprocho—. Te creía mi amiga. ¿Alguna vez pensabas contármelo?

—Lo iba a hacer, te iba a contar todo, estaba esperando el momento indicado para...

—¿Para qué? —no pienso creerle— Tuviste mucho tiempo para hacerlo y no lo hiciste. Te burlaste de mí, sabías lo importante que es Nathan, estuviste ahí, me viste llorar y aun así no fuiste capaz de hablar.

—No lo entiendes —sus ojos cristalinos me miran directo a los míos, puedo ver el enojo en ellos, pero ella ya no me importa—. Nunca lo entenderías y no importa lo que digas o pienses, ya no. Si tuviera que volverlo hacer lo haría, no cambiaría nada.

Sus palabras solo hacen que mi enojo crezca mucho más, solo hacen que no me arrepienta de lo que pueda hacer.

—Eres una...

Mi Perdición© +18 [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora