Se oía sonido de fondo, como un ruido blanco demasiado lejano, de fuente no identificada. Por sus ojos entraba la luz, sin embargo, sólo veía algunos colores borroneados, como si estuviesen mirando a través de un vidrio empañado. Su visión simplemente estaba desenfocada dirigida al frente en un punto fijo pero no viendo realmente.
No se movía, sabía que estaba sentado, pero la sensación de estar flotando se mantenía en el tiempo, incesante. Estaba en una balsa, naufragando en el medio del océano. La luz del sol encandilando el ambiente desprovisto de la sombra de la vegetación, las olas siendo ese sonido de fondo, como cuando acercas tu oreja en una caracola para escuchar en su interior el sonido que te transporta al mar, y tu cerebro te hace recordar el aroma de la salitre mezclada con la arena.
Su respiración era serena. Finalmente, el ruido blanco del mar fue interrumpido por el graznar de las gaviotas sobrevolando su ubicación. Estaba cerca de la orilla. Aún no lograba ver bien, pero no importaba, podía respirar. Sus pulmones se sentían bien abiertos y el vaivén de la balsa le gustaba.
Se hizo una sombra encima de él, tapando el sol como si las nubes se hubiesen agrupado. Escuchó el eco de una voz, llamando desde la orilla, así de lejos se oía.
No entendía bien qué decía, hasta que se fue acercando.
Jungkook.
Ese nombre se estaba repitiendo una y otra vez. Más cerca, más lejos. La balsa comenzó a moverse un poco más fuerte.
- Jungkook – la voz se oyó esta vez fuerte y clara. Cerca.
De repente se encontraba sentado en la entrada de su casa, sobre los primeros escalones y de espaldas a la puerta de madera. En su hombro había una mano, la cual le había estado zamarreando.
Levantó su mirada, el sol detrás del chico le lastimó la vista y le hizo entrecerrarlos con molestia.
- Jungkook, ¿me escuchas? – la voz sonó grave. No lograba reconocer de quien se trataba incluso aunque le mirase directo a la cara. El sol, el sonido del mar, las gaviotas y la balsa meciéndose eran demasiados estímulos para él en ese momento - ¿Jungkook?
¿Quién era Jungkook?
- ¿Qué haces aquí afuera? Por favor, responde de una vez – le decía. La mano dio un tirón y le hizo levantar – Te ayudaré a entrar.
De alguna manera fue transportado hacia el interior de su casa. El sol se calmó, gracias a Dios.
Cayó en una superficie blanda, demasiado buena para ser verdad. Gimió de gusto, pero se quejó cuando notó que su cabeza estaba rebotando un poco. ¿Qué era? Unos chasquidos le siguieron.
Alguien le estaba dando palmadas en el rostro, en sus mejillas.
- Mierda, maldición. ¡Despierta de una vez!
Él estaba despierto. Demasiado para su gusto. No sabía quién era esa persona ni tampoco le importaba.
La balsa se dio vuelta por una ola enorme y el agua le cubrió por completo.
Parpadeó, siendo el shock de temperatura demasiado fuerte. De alguna manera se había erguido sobre el sofá de su casa. Jungkook estaba empapado con agua helada.
- ¿Qué mierda estás haciendo? ¿Qué mierda has hecho? – la voz era grave, pero la desesperación le hacía flaquear al final de cada frase.
- Yo... - intentó hablarle. Una punzada en su vejiga le hizo estremecer con dolor – Baño... - murmuró con voz rasposa.
- ¿Baño?
- Necesito...
El chico se levantó rápidamente, tironeó de él y lo llevó a rastras nuevamente hacia algún lugar.
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• Falling for you ~ [KOOKMIN] •
FanficJungkook está enamorado de su mejor amigo, y siempre va a estarlo. - Minific (historia corta, pocos capítulos). - Historia completamente original. - Jungkook top - Jimin bottom. - Angst. - Contiene escenas de sexo, violencia física y verbal. Violenc...