11🏐💌

0 0 0
                                    

<<<Tengo raros gustos musicales>>

\Narrador omnisciente/

Era una calurosa noche de septiembre, cuando dos adolescentes estaban sentadas en el piso al lado de los postes que sostenían la malla de volibol viendo la práctica de la categoría pre-juvenil Femenina. Ya su práctica había acabado y no les importaba quedarse un rato más para ver el entrenamiento predeterminado para sus mayores.

Estaban sentadas la una al lado de la otra, la azabache tenía su cabecita recostada en el hombro de la castaña y estaba tan cómoda que no tenía planes de moverse de esa posición. La de mayor estatura al ver que la de pecas se le acercó de manera tan íntima decidió recostar su cabeza encima de la bajita, así dándoles una linda imagen a las personas de ahí que pensaban que eran muy buenas "amigas". La de cejas prominentes estaba escuchando música y la de cabellos oscuros solo presenciaba la práctica, de un momento a otro la pecosa levantó su cabeza para no quedarse dormida ahí mismo y miró al rededor con algo de aburrimiento e indiferencia.

Esto lo notó la de brackets celestes, quien le tocó ligeramente el hombro para captar su atención, al tener está, le propuso algo.

–Oye, ¿quieres escuchar música?– se atrevió a preguntar

–Si, claro– aceptó contenta la mayor

–Toma– pronunció extendiéndole el pequeño aparato color beige con negro

Este fué tomado por la de tes color nieve y colocado en una de sus orejas de manera errónea, esto ocasionó una pequeña carcajada en la menor quien se lo quitó y se lo colocó en la otra oreja como debía ser. La azabache no hizo más que sonrojarse por su acción tan tonta, lo que solo hizo sonreír a la contraria quien colocó una canción al azar.

–Tengo que advertirte que tengo raros gustos musicales– dijo Ateate rompiendo el silencio en el que se encontraban sumergidas el par

–¿Raros cómo?– preguntó Nene interesada en los gustos de su compañera

–Me refiero a que son muy variados, tengo un poco de todo– Mencionó mostrándole su dispositivo celular dónde en la pantalla aparecían Miles de artistas y canciones diferentes– ¿ves?– dijo

–¡Woah! Si que son muchos grupos y artistas– dijo impresionada, estaba feliz por conocer a alguien igual de bipolar a ella en el sentido musical

–¿Cuál pongo?– dice buscando una canción que les agrade a las dos

–La que sea, para mí está bien– aseguro poniendo su vista de vuelta en la cancha

–Está bien– colocó París de ingratax

La canción no era nueva pero igual había tenido su boom en su momento, era un tanto conocida y al par le gustaba. Ambas movían sus cabezas al ritmo de dicha canción, Ateate paró en seco al escuchar unos murmullos proveniendo de su acompañante

–Me imaginaba tu y yo en París.. con la foto del recuerdo en Mayami~.– pronunciaba en casi inaudibles murmullos la de dientes de conejo

–Me tienes bloquea la mente, ¡Chori!– susurró siguiéndole el rollo a su amiga

–Y no puedo verte~– finalizó para dedicarle una mirada de ilusión

Las dos se miraron fijamente con una mirada asombrada e intensa, parecía que estaban hablando telepáticamente, sus miradas mostraban millones de sentimientos en un solo segundo, pero ninguna se atrevió a decir nada, así siguieron hasta que la cancion acabó sacándolas de su burbuja de caramelo.

–Ten– dijo para darle el celular– escoje una tú– exclamó con una sonrisa sin mostrar los dientes 

Nene tomó el celular sin saber que poner, indagó en la infinidad de canciones hasta que una que se sabía a la perfección chocó con su vista. Al asegurarse de que si era esa le dió play y "rubia sol, morena luna" se empezó a reproducir en ambos auriculares

–Una toma Prozac cómo tiktak, los pasa con coñac y con balzar– empezó a cantar en voz baja la de rizos

–La otra le gusta Arjona y Copelo, juega con su pelo, quiere ser modelo– siguió el verso con el mismo tono de voz

"Si uno es soledad y dos son compañía, tres es como jugar a los espías, contra la KGF y la CIA. Una lleve el eben, en el sostén, esa se mueve bien, la otra también; Una cree en duendes y en hadas, la otra cree en Prada, no cree en nada.No sé a cual quiero más o a cual soporto menos, he Sido un mentiroso, un infiel, no estuvo bien, pero si estuvo bueno".

"He aprendido que amar a dos es igual a no amar ninguna, rubia sol morena luna, ¡mi tragedia es mi fortuna!". Cantaron al unisono las dos.

–Claro que no funciona, si somos tres mitades~– pronunció con los ojos cerrados la de tes dorada

–¡Cuando hay más de dos personas, siempre hay más de dos verdades!– continuó eufórica la pecosa

–Y hasta que todo caiga, bajo su propio peso~– formuló agudamente secando en demasia su cavidad bocal

–¡Sigo recibiendo mi karma, sigo mintiendo con besos!– also un poco la voz logrando captar varias miradas juzgadoras y algunas curiosas

Después de ese pequeño show que dieron a la luz de la luna, pusieron otra canción, está no la conocía Nene, pero fingió que si porque sabía que a Ateate si le gustaba y no quería arruinar el bonito momento que estaban compartiendo.

Terminó esa canción con vibras de vallenato de los viejos, Ateate le volvió a entregar el dispositivo para que colocar de nuevo otro tema pero antes de que pudiera poner otra canción icónica para el dúo de voleibolistas, la madre de la menor había llegado para llevarla a su casa.

Fué algo triste para ambas pero aún les quedaban días de vacaciones para disfrutar de más canciones juntas así que no siguieron dándole vueltas al asunto. Al escuchar algunas de esas canciones no podían parar de pensar en la otra y en lo bien que se sintió jugar al karaoke, se sintió especial, cómo si el tiempo se congelará a su alrededor y todos de repente desaparecieran dejándolas completamente solas a las dos.

¡Ateate, me gustas!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora