Capítulo Veintiuno

23 3 0
                                    

Capítulo veintiuno.

Hyungwon siguió empujando en su interior una y otra vez, tocando ese punto tan sensible en su interior y haciéndolo gemir mientras su mano acariciaba su propia erección con rapidez, Dios, sintiéndose tan malditamente cerca.

La respiración de su amante estaba en su nuca, tan caliente, y su pelvis chocaba contra las mejillas de su culo en cada estocada, y sus piernas se sentían tan frágiles, sin soportar estar sosteniéndolo por más tiempo. Y, mientras la polla de Hyungwon frotó con tanta intensidad su próstata que creyó morir, la caliente ola de placer que lo recorrió desde su espalda hasta sus bolas lo estrujó, haciéndose venirse tan fuerte y duro como nunca. ¡Dios, Dios!, ¡Sí!

—Minhyuk...—Gimiendo su nombre y apretando los dientes por el delicioso apretado abrazo del interior de Minhyuk Hyungwon también se vino, sin dejar de empujar contra él y cuando terminó de desboronar su excitación se desplomó en la espalda de Minhyuk, haciéndolos caer a ambos a la cama.

Escuchando la leve risa de Hyungwon tras suyo hizo a Minhyuk sonreír como un idiota. Amaba a su demonio.

Hyungwon se quitó de su espalda y se acostó a su lado, su respiración agitada igual a la suya, sus cuerpos sudaos y sonrojados.

—Bueno, eso fue un muy "buenos días" —Hyungwon comentó, su voz divertida.

—Beberías de ser mi alarma, quiero despertarme así todos los días —Era domingo, y gracias al Cielo no había trabajo —¿Qué haremos hoy? ¿Lo usual?, ¿Películas y comida? ¿o quieres cambiar la rutina?

—Quiero salir.

—Pensé que no te gustaba salir, ya sabes, con todo y este peligro —Dijo, doblando los ojos mientras bufaba.

Hyungwon le lanzó una mirada burlona —¿Y ese sarcasmo? ¿Piensas que esto en un juego? Hasta cuando te sometas a la realidad te darás cuenta de lo que hablo, ángel.

—¿Qué quiere decir eso?

Hyungwon simplemente rió —Dúchate, iremos a un lugar ultra secreto anti humanos.

—¿Cuál?

—El cine.

Una hora después entraban al salón número cuatro del cine en el mall. De qué trataba la película o el nombre de ella, no lo sabían, pero Minhyuk estaba ansioso por volver a salir. Ya habían pasado tres semanas desde que no salían, y cuando lo hicieron fue solo dos veces, unas en las que Hyungwon siempre vigilaba a los costados de soslayo, buscando. No es que a Minhyuk le molestara el ser protegido, pero mucho de ello lo agobiaba de algún modo. Y, de acuerdo a las palabras de Hyungwon, el demonio aquel que se atrevió a tocarlo y como Hyungwon lo apodó "Hijo de puta", no había asomado la cabeza por este tiempo. Por supuesto, su presencia siempre se sentía, como si estuviera observándolos desde una muy larga distancia, pero, a pesar de su fuerte presencia nunca hacía un movimiento más, por lo que Minhyuk dejó de preocuparse.

—Pensé que no te gustaban estas cosas realmente —Minhyuk habló por primera vez desde que abandonaron el apartamento.

—No me gustan.

—Y, ¿por qué lo hacemos entonces?

—Porque te hace feliz.

Minhyuk sonrió con felicidad, estando de acuerdo. Hyungwon también le sonrió y le dio un beso en la nariz con ternura.

—Aún no puedo acostumbrarme completamente a que seas tan dulce conmigo, sabes —Comentó, su voz divertida, pero con conmoción —Y lo amo.

Hyungwon se echó a reír —Lo sé, ya sabes, no acostumbro a ser de esta manera, pero contigo es diferente. Es decir, no importa si no soy así, tú me haces cambiar.

Bad Demons Bad Angels (Hyunghyuk Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora