- Corazón | 𝑶𝒗𝒊𝒅𝒊𝒐 𝑮𝒖𝒛𝒎á𝒏

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Sarah Valen. 🤍
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Me encontraba en la escuela de mi hijo ya que apenas era la primera semana y ya había problemas con el.

Sarah: Dígame, ¿que paso con mi hijo? — Dije en cuanto entre a la dirección viendo a la maestra de mi niño con mi hijo y otro niño con su mamá ahí.

Maestra: Mire, su hijo golpeó a su compañerito en la hora de receso — Señaló al Niño quien tenía leves marcas en su cara.

Sarah: ¿Por que lo hiciste Rommel? — Me acerque a mi hijo quien estaba serio, lo conocía como la palma de mi mano lo habían echo enojar.

Rommel: El empezó diciéndome de cosas mamá tú sabes — Me miro aún serio, algo le ah de ver dicho para que se enojara de esta manera.

MamáN(niño):  Fíjese señora como dejo su plebe a mi hijo, todo golpeado — Sentó al niño sobre su regazo.

Sarah: Fíjese usted señora, su hijo le a de ver dado motivos a mi hijo para que lo golpeara — Rodé los ojos.

Niño: Yo no le dije nada — Miro enojado a mi hijo haciendo que esté le mantuviera la mirada.

Rommel: Claro que si, te metiste con mi papá y me dijiste huérfano — Le gritó aún más serio, tiene la misma mirada que su papá Cornelio y aprendido de su papá Ovidio.

Sarah: Ya ve maestra mi hijo no golpea así por que si, que me van a decir a mi si lo conozco como la palma de mi mano, es mi hijo — Negué, trataba de mantener la calma pero no podía con el coraje.

MamáN: Mi hijo no tiene la culpa de que su hijo ya no tenga papá — Rio hipócritamente, me estaba ganando el coraje.

Sarah: Mi hijo claro que tiene papá, gad tiene figura paterna en casa que lo eduque cosa que le falta a su hijo por su culpa — La señale, el niño no tenia la culpa de tener una mamá como ella.

Maestra: A ver ya señoras, José estará suspendido 3 días y Rommel solo 2 — asentí para tomar mi bolso y salir de la mano con mi hijo.

Rommel: De grande seré como mi papi Ovidio, que todos me tengan respeto.— Negué, no me gustaría que mi hijo siguiera los pasos de Ovidio pero se que algún día llegará el momento.

Sarah: Mi amor esos pensamientos ahorita no, estás muy chiquito para eso cuando estés grande veres que pasará por mientras cuidarás a tu hermano Vicente y la bebita — Lo subí a su asiento para bebés para luego subirme yo.

Rommel: Yo ya se que quiero ser de grande, y también tocaré el acordeón como mi papi Corne — Sonreí al escuchar lo último mencionado, me gustaría que tocara el acordeón como su papi.

Sarah: Está bien mi amor, hablemos de otra cosa — Dije manejando viendo como su carita seguía seria.

Rommel: No quiero hablar — Volteo hacia la ventana ignorándome por completo.