Niños tontos, que sabían ellos de jugar. Solo lanzaban zapatos a los cables de los postes de la calle, es el juego mas estúpido que he conocido.
Aun así yo quería hacerlo, no por los zapatos sino porque quería ser parte de ellos: Los chicos rudos de la cuadra. Ellos mismo se pusieron el nombre, no podía ser mas soso pero aaaaaah con cuidado de decir una sola palabra porque no te aguantarías las burlas y tonterías que te hicieran. Demonios ¿Qué tenía que hacer para que me aceptaran?
Así que aquí me tienen, sentada en la banqueta de mi casa, haciendo círculos en la tierra con un palo. En verano, super divertido.
-¿Por qué no estas jugando con los demás niños?
La voz de alguien que no conocía me hizo levantar la cabeza. Era un chico que jamás había visto.
-A nadie le gusta jugar con una niña
-Es que las niñas lloran por todo.
Odiaba esa frase, todos siempre decían lo mismo. Yo no lloraba. Bueno, excepto esa vez cuando me caí de la bicicleta la semana pasada, o cuando vi esa película donde muere el perro... ¡Pero juro que solo esas dos veces!
-No es cierto, yo no lloro.
-Si es cierto. Las ensucias, lloran; si no aguanta una broma, lloran; cuand...
-Se que las niñas son muy chillonas, pero yo no.
-Eres una niña ¿Por qué serias diferente?
-Porque yo quiero
Nos quedamos un momento en silencio hasta que el niño de ojos de limón comenzó a reír a carcajadas. Y sin pensarlo lo hice tambien. No se porque reíamos pero lo hacíamos.
Podría jurar que nunca vi a este chico, tenía cabello largo y café claro, ojos verdes como los limones que aun no maduran, con una piel cafecita clara, daba la impresión que regresaba de la playa. Flaco, pero con una camisa y pantalón holgados y tenis negros. Se veía muy diferente a los chicos de la cuadra. Y eso me gusto.
-Soy Marcos, por cierto.
Se sentó a un lado de mi y me ofreció su mano, eso me hizo reír pero lo hice tambien.
-Julia, pero dime Juli.
-No, Julia me gusta.
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El libro secreto de los chicos
Teen FictionFácil, Marcos ha sido mi mejor amigo por seis años. Lo difícil, ahora es como si todo se fuera al carajo. Fácil, encontrar ayuda. Difícil, que la ayuda solo te hunda mas. Empecemos por plantear el problema. Numero uno: Marcos y yo hemos tenido exclu...