"El Chico De Mis Pesadillas" |Austin Mahone| [FINALIZADA]

Capitulo 15 "La Voz"

— ¿Enserio quieres que me vaya? —  dijo con una sonrisa.

— ¡Si, no puedo creer que hayas hecho algo como eso! — exclame enojada.

— ¡Hay, esta bien! Solo te aviso que tu querido Armando no durara mucho tiempo.

— ¡Vete! — Austin desapareció de ahí, no puedo creerlo, como es posible que sea tan malo y le haya hecho eso a Armando.

Me quede dormida aun lado de Jos.

Al despertar mire el reloj eran las 2:01p.m ahora si dormí mas y gracias al cielo Austin no estuvo dentro de mi sueños.

Mire a mi lado y Jos ya no estaba.

— ¿Primo? — pregunte. Jos salio del baño rápidamente.

— ¿Que sucede? — pregunto alarmado.

— ¡Jos, estas bien! — me pare de la cama y fui a abrazarlo.

— Amm si, al parecer nos quedamos dormidos — no recordaba nada.

— ¿No te...acuerdas de nada?

— No, ¿deberia recordar algo? — pregunto confundido.

— Amm no en realidad, ¿oye a que hora despertaste?.

— Ya tiene rato, la verdad no me fije en la hora...oye tengo sed.

— ¿Quieres que te traiga un vaso con agua? — pregunte.

— Por favor, en lo que busco una buena película para ver.

Me detuve al parecer tampoco se acuerda de que me espantaron.

— ¿Pasa algo, prima? — me pregunto.

— No Jos, no pasa nada. Ahora vuelvo.

— Espera voy contigo, sirve que busco la película — me dijo.

— Ok, vamos — los dos bajamos a la sala de estar.

— ¿Donde las guardas? —pregunto.

— En el cajón del mueble grande — ¿Por que no se acordara de nada?

— Bueno.

Jos fue a buscar la película y yo me dirigí a la cocina por el vaso con agua. Tome dos vasos y serví agua de fresa y los lleve hasta mi habitación, para posteriormente bajar con Jos.

— ¿Ya encontraste alguna que llame tu atención? — pregunte.

— Si, ¿Que te parece esta? — me mostró una que llevaba como título "La noche del demonio"

— De preferencia que no sean de terror — después de todo lo que pasa, no me gustaría sugestionarme mas con películas de ese tipo.

— ¡Vamos prima, no seas miedosa!.

— No, no soy miedosa — solté un suspiro rendida — pero esta bien, veamos esa...

— ¡Genial!.

— Los vasos de agua esta arriba.

— Gracias.

Subimos a mi habitación, tome mi celular y tenia un mensaje de Elisa.

¡Davina! ¿Iras a ver Armando?

Elisa.

La verdad no se si ir, es que nunca me he llevado bien con sus amigos y seguro todos esos estúpidos se encontraban ahí, mejor iré otro día a verlo, no creo que Austin lo halla matado.

No creo seguro sus amiguitos idiotas están ahí, prefiero ir a verlo mañana.

Davina.

Bloquee mi celular.

— ¿Todo bien? — pregunto Jos tomando un sorbo de agua.

— Si, es solo que Armando...tuvo un accidente, no creo que sea algo tan grave — explique

— ¿Te refieres al idiota que te hizo sufrir? — pregunto y se dirigió a poner la película.

— El mismo, pero ya no importa.

— No, pues que mal — dijo el y puso play a la película y se sentó junto a mi, abrió las botanas que había traído y comenzamos a comerlas, Jos no paraba de tomar agua lo que se me hizo extraño.

— Oye, iré por mas agua — dijo y se salio de la habitación, me quede sola, mi celular volvió a vibrar, era un mensaje de Elisa.

Si, tienes razón... oye ya no pude ir a tu casa después de clases así que iré como a eso de las 5:00pm me esperas ♥

Elisa.

Le respondí.

¡De acuerdo! Aquí te espero.

Davina.

Bloquee mi celular y me dispuse a ver la película.

Maldito Austin como pudo llegar a mi vida, esto es malo, no quiero verme en vuelta en estos asuntos horribles. Da miedo.

Jos llego con la jarra llena de agua y un vaso.

— Lo siento — se disculpó — es que tengo mucha sed, y no se me quita ni con toda esta agua, es extraño — tomo agua.

— La verdad si — recordé que Austin me dijo que tendría la necesidad de beber sangre, ¿sera por eso? — oye... — le diría acerca de eso, pero seria raro para él, tendría que encontrar la forma de que bebiera sangre sin que se diera cuenta.

— ¿Si? — pregunto.

— Solo que, iré a echarle salsa picante a la botana. Regreso — tenia una idea echaría un poco de sangre a las frituras.

— Claro — el se quedo en mi habitación.

Baje a la cocina y busque la salsa, la encontré y le eche a las frituras.

— ¿Y ahora, de donde saco sangre? — dije

— Cortate tu —  escuche una voz.

— ¿Yo? — dije extrañada.

— Si quieres, ayudar a tu primo eso es la única solución.

¡Esa voz! ¿de quien es?

— Cortate tú  — volvió a decir.

Sin pensarlo tome un cuchillo y corte la palma de mi mano.

— ¡Auch! —dije y derrame unas pequeñas gotas en la botana.

— Si, muy bien.

Subí de nuevo a la habitación.

— Listo Jos — el tomo la botana.

— Gracias — tomo una pieza que contenía sangre y la masticó — sientate, la película se pone interesante.

— ¡Oh si! — me senté junto a el.

Vimos toda la película.

— ¿Ya se te ha quitado la sed? — pregunte curiosa.

— Si, ya estoy bien — ¡genial si funciono!

— ¿Que hora es? — pregunte.

— Las 4:00pm — me dijo —¿Quieres ir por un helado?

— Si vamos, solo dejame cambiarme — dije.

— De acuerdo te espero abajo.

Jos bajo, a la sala de estar.

Me cambie de ropa, me puse una sudadera y un pantalón de mezclilla con tenis algo cómodos y baje.

— Lista vamos — el asintió y salimos de casa, caminamos hasta el parque y no pude creer lo que vi.

-Dalia