Dragon's

11

Días había pasado, ella no salía de casa y solo comía lo necesario, estaba cansada,era como si su energía se agotará y no era para más.

Desde ese día evitaba a SeokJin como si aquello fuera posible, no dormían en la misma habitación y siempre trataban de no estar en el mismo lugar aún que eso era lo que ella quería.

Jin trato de hablar sobre el tema y preguntar por qué de su actitud y simplemente recibió negativas de su parte.

Si bien no quería aceptar lo,al final no pudo ocultarlo.

—Nunca lo deje de querer....pero tengo miedo de confiar en él.

—No se cómo sean los sentimientos de los dragones pero lo que si estoy segura es de que si vives en el pasado y dejas que tus miedos te controlen nunca serás feliz.

—Seras la sabiá del pueblo...mi confidente.

Sophia le sonrió mientras se acercaba para abrazarla—Los dragones no son tan diferentes a un humano cuando se trata del amor...así que se valiente y dale frente a ésto, si quieres que él sea sincero contigo entonces tú debes serlo con él.

—Lo haré. Gracias.

—No es nada, me iré ya, así que piensa muy bien lo que le dirás.

—Si, ve con cuidado a casa.

Las horas pasaron y la noche llegó. Karina esperaba en la sala con una vestimenta especial, esa solo se la ponía cuando quería que las cosas salieran bien.

Una falda de cuero con un top del mismo material; su cuerpo era ajustado por cuerdas solo para completar la unión de ambas prendas, ese vestuario no fue más que un regalo de su madre al regresar a casa cada que sus salidas surgían.

Peino su cabello  dejando dos mechones enfrente y lo demás atrás cuando escucho la puerta siendo abierta, SeokJin estaba ahí con con su ropa habitual.

Su cabello desordenado fue lo primero que vió.

—¿Estás muy cansado?

—¿Sucedió algo?

—Nada de que preocuparse...¿Crees que podamos hablar?

—Dime que necesitas.

SeokJin caminó hasta el sillón frente a ella,se sentó colocando toda su atención a la chica .

Karina con nervios se levantó,camino hasta él y se sentó en sus piernas. SeokJin la miró con sorpresa, la falda que tenía puesta dejaba ver mucho y volvía imposible no mirar entre sus piernas.

—Quiero hacerlo...y no hablo del sexo,quiero intentar aceptarte como mío.

—¿Cómo?

—Se que es extraño todo este cambio pero...creo que sí no doy mi brazo a torcer por esta vez ,llevaré una vida miserable y mis hijos igual, no quiero eso, quiero ser digna de ser dragón y para eso debo aceptar mi destino...quiero hacerlo Jin,quiero ser tuya sin fingirlo.

"Quiero ser tuya" esa fueron las palabras qué él espero siempre y ahora las recibía,no entendía por qué o cómo pero no buscaría la fuente de su propuesta.