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Jungkook llegó a la sesión de fotos de Calvin Klein con una mezcla de emoción y expectación. Al entrar, vio a Yejin posando con una gracia natural que lo dejó sin aliento. Su corazón latía rápidamente, casi como si el universo estuviera conspirando para unirlos.
- Wow, es increíble... -se dijo a si mismo
Mientras la observaba, Jungkook no podía evitar notar cada tatuaje que adornaba su piel. Cada trazo contaba una historia, y él se sentía intrigado por descifrarlas. Cada detalle era una pista, una ventana a la personalidad y experiencias de Yejin.
Se dió vuelta hacia los miembros del equipo - ¿Quién es ella? ¿Cómo se llama?
- Esa es Noh Yejin. Es nuestra modelo principal para esta sesión. Impresionante, ¿verdad? -le respondió alguien de la producción
Después de la sesión, Jungkook se acercó a Yejin con timidez, pero su determinación superó cualquier nerviosismo. Comenzaron a conversar, compartiendo risas y anécdotas. La conexión entre ellos fue instantánea, como si sus almas se reconocieran de un tiempo lejano.
- Hola, soy Jungkook. Tus fotos fueron increíbles.
- ¡Hola Jungkook! Gracias, tú también eres parte del talentoso equipo de hoy.
A medida que pasaban las horas, descubrieron que tenían mucho en común, desde sus gustos musicales hasta sus sueños más profundos. La chispa entre ellos era innegable, y ambos se sentían atraídos de una forma que solo se experimenta una vez en la vida.
- ¿Sabes? Me encantan tus canciones -le dijo Yeji mientras descansaban
- ¡En serio te gusta mi música? Eso significa mucho para mí, Yejin. -dijo Jungkook sorprendido.
- Sí, absolutamente. BTS y tu música en solitario tienen un lugar especial en mi lista de reproducción. "Seven" es una de mis canciones favoritas.
- ¡Oh, wow! Eso es increíble de escuchar. Gracias, Yejin. Esa canción es muy personal para mí.
A medida que compartían sus gustos musicales, la conexión entre ellos se profundizaba. Descubrieron que tenían más en común de lo que imaginaban, y cada conversación era una oportunidad para aprender el uno del otro.
- Sabes, me siento muy afortunado de haberte conocido en esta sesión. Siento que hay algo especial entre nosotros.
- Estoy de acuerdo, Jungkook. Es como si el destino nos hubiera unido de alguna manera.
A medida que pasaban las horas, la atmósfera en el estudio se cargaba de una energía palpable. El equipo de Calvin Klein estaba impresionado por la química entre Jungkook y Yejin, y no pudieron resistirse a capturar esa magia en el lente.
- Chicos, la conexión que tienen es increíble. ¿Qué les parece si hacemos algunas fotos juntos? -les dijo el director de la sesión entusiasmado.
Jungkook y Yejin se miraron, compartiendo una sonrisa cómplice que decía más que mil palabras.
