ᵐⁱ ʰᵉʳᵐᵒˢᵃ ⸙ 𝑫𝑬𝑰𝑫𝑨𝑫 「𝙺𝙰𝙸𝚂𝙰𝙶𝙸」

─── ⸙ ⋅✦𝙻𝚘𝚜 𝚝𝚘𝚛𝚝𝚘𝚕𝚒𝚝𝚘𝚜✦⋅ ⸙ ───

Su aura cambio, su pose cambió. Todo de él cambió por tan solo un momento.

──Isagi.── susurro muy alarmado el emperador, nunca había visto tan furioso a aquel lindo ser

Al menor de manera mágica, se le puso una vestimenta muy sorprendente, era una armadura de oro puro y hermosos minerales muy costosos. Era muy impresionante.

──Morirán todos aquellos que sean enemigos.── su pose en ese momento era de combate, ese ángel ya estaba más que listo para pelear

Todos se alarmaron, más que todo cuando esa espada se iluminó. No eran cobardes pero, algunos de los miembros salieron huyendo.

──¡No huyan! ¡Ataquen!.── gritó ese gobernante, de cabello teñido

──Bachira amor, huyamos, nosotros debemos sobrevivir y avisarles.── susurro su pareja muy asustado, quería alejarse de ese mal que se aproximaba

──Huye Reo, huye y no veas atrás.── el rey de la felicidad empujó suavemente a su pareja, la quería lejos de ahí para su bien

──Pero Bachira..

──¡Vete! Avisa a los demás sobre este descubrimiento.── convenció al oji lila, alguien tenía que avisar sobre aquel ángel aliado

El único sobreviviente de los Mikage salió huyendo, se fue a toda prisa montando su veloz y bello caballo.

Dejo atrás aquella batalla.

──Kaiser, abraza mi cintura.── ordenó con una voz muy firme, llamando la atención del rey quien lo observaba atónito. ¿Ese lindo ángel se volvió así?

──Isagi..── dio un susurro apenas audible, se asombro por la petición y se avergonzó mucho. Acató la orden y abrazo aquella pequeña y fina cintura. A pesar de la armadura que llevaba, podía sentir su pequeña cintura y sus anchas caderas

Tras verificar que el emperador obedeció sus órdenes, el ángel levantó su espada y gritó tras atacar, un gran destello se alzó por todo ese bosque. Todo a su paso fue barrido y eliminado, aquella gran explosión elimino a todo aquel cercano como lejano. Acabo con todos sus enemigos, pero tenía que ir a acabar con aquel que logró huir.

──¿Cómo..?── no tenía palabras para articular. ¿Por qué él no había sido eliminado también? Se preguntaba el motivo de esa causa

──Me tocaste y yo no puedo matarme a mi mismo. Te pase un poco de mi poder para protegerte.── se quitó el casco que llevaba y le sonrió con dulzura al rubio

──Te..── detuvo su hablar, casi suelta de más su lengua. Iba a cometer un acto muy loco, pero mejor se quedó en silencio

──¿Amo?── ese ángel rio divertido, para luego rodear con sus brazos el cuello del más alto. Ambos se observaban con mucho cariño y se sentían hipnotizados en los ojos contrarios

Un ruido, un ruido alertó a ambos y tuvieron que separarse. El peliazul se separó del emperador, se puso delante de él en forma de ataque. Sea lo que sea, protegería a su amado de todo mal.

──Es un conejo.── con mucha incredulidad soltó el monarca. No había motivo para temer a un animal más bajo que ellos

──Bien.── sonrió, al acercarse nuevamente al chico de ojos claro.

──Yoichi..── susurró, contra aquellos carnosos labios. Ambos se unieron en un beso, sentían mucho amor entre ellos

El ángel al ser más bajito de estatura, fue tomado de su cintura y alzado en brazos contrarios. El más alto de ellos lo tomó y alzó, para poder sentir mejor ese beso. Ambos querían disfrutar y sentir más de aquel tierno acto.

Se separaron por falta de aire, de sus labios se reflejaba un pequeño hilo de sus propias saliva. El ser mágico fue bajado y tocó nuevamente el suelo, ambos se observaban y sonreían sin ningún motivo. Sentían a sus respectivos corazones latir de manera desenfrenada.

Un tierno momento que fue interrumpido.

Una flecha, una flecha le dio al lindo ser.

Ambos chicos se habían sobresaltado y mucho, Kaiser se asusto al ver caer a su ángel, rápidamente lo tomó de su cintura, apoyando el cuerpo contrario contra el suyo.

──No te preocupes, estoy bien, puedo curarme rápidamente.── rio nervioso el peliazul ──Quédate aquí, iré a ver de quién se trata. No dejaré que alguien ande suelto y intente herirte.── ese semblante siempre enamoraba al rubio, cuando el ángel se ponía serio era mucho más encantador ante la vista del mayor

Se fue, cuando su amado terminó de hablar se fue volando a toda velocidad. Lo dejaron sólito, pero confiado en que está a salvo con su sola presencia.

Kaiser volvió nuevamente donde sus hombres, con total tranquilidad llegó, pero fue recibido por un chico enojado.

El emperador fue sacudido de manera muy brusca. Estaba siendo regañado.