²

1K 118 69
                                    

Takeshi sabía que debía conseguir información de algún lado, la pregunta era, ¿dónde?

Ni su mamá ni su tío querían hablar sobre el tema, la última vez que intentó presionar a su mami para hablar, le escuchó llorando por la noche, en silencio y en su habitación, aunque las preguntas no cesaron, Takeshi jamás volvió a ejercer presión.

No tenía el conocimiento suficiente para buscar alguna dirección o algo, la oficina de Sae era demasiado grande para un pequeñito como él.

Por suerte, hoy venía a recogerlo de la escuela su cuarta persona favorita en todo el mundo, Aiku Oliver.

-Llevas un buen rato mirándome así, ¿qué sucede pequeño Take?-Preguntó con la vista en el volante y dando pequeños vistazos al retrovisor de vez en cuando.

-Aiku, uhm...

Takeshi siempre preguntaba todo, nadie sospecharía por un par de inocentes dudas y menos un chismoso como Oliver. Pero por más chismoso que fuera, Sae lo mataría si comentaba cosas que no.

-¿Te gusta mi mamá?

-¿¡QUÉ!?

A Aiku casi se le olvida que manejaba dando un chirrido con las llantas. Miró al niño através del espejo, dudando y con una gotita de sudor bajando por su mejilla.

-¿A qué viene eso?

-Nunca te he visto con nadie.

-Que no veas eso no significa que me guste tu mamá-Suspiró redirigiendo su vista a donde conducía-Ya estoy conociendo a alguien.

-¿Ah sí? ¿Quién?-Sonrió curioso.

-¿Te han dicho que eres muy entrometido para tener nueve años?

-¿Qué es entrometido?

-Chismoso.

-Ah-Pensó-No, ¿a ti sí?

Aiku rió.

-Sendou es un beta hermoso, también es amigo de tu mami-Respondió contestando la pregunta del menor.

Bingo.

-Oh.

-¿Y a qué vino la pregunta?

-Curiosidad-Contestó simplón-¿Por qué no lo presentas?

-Es muy pronto, Takecchan.

Una semana después de alguna forma Takeshi se las arregló para tomar el celular del capitán del equipo de fútbol, encontrar el número de Sendou y llamarlo.

A Sendou lo sacó de onda el ser atendido por la voz infantil de un chiquillo, pero cuando le preguntó su nombre, las piezas se acomodaron.

"-¿Eres Takecchan?

-Sí, ¿tú eres Sendou?

-Jeje, ¿por qué asaltas el celular de mi novio?

-Shhh, no sabe que yo lo tengo, está como loco buscando en la casa.

Sendou soltó una risita enternecida, Takecchan tenía una voz parecida a Sae, que agradable.

-¿Puedes devolvérselo?

-No, quiero hacer negocios contigo.

Aiku tenía razón, el niño era alguien muy inteligente para su edad. Y también parecía que veía muchas películas.

-¿ah sí? Dime de que se trata-Decidió seguirle el juego-Agente T.

-No estamos jugando a los espías, has silencio por fis.

Sendou rápidamente se calló. Un niño de nueve años lo mandó callar. Pero no era cualquier niño de nueve años, era hijo de Sae Itoshi.

-Quiero conocerte.

-¿Conocerme?

-Aiku siempre habla mucho de ti, dice que eres lindo, que tus ojos son brillantes y tu cabello es suave y esponjoso, que eres el ser más maravilloso de todo el mundo, te quiere mucho mucho muuuuucho.

Sendou ruborizado por las palabras "inocentes" del cachorro enroscó su dedo sobre sus cabellos. Quizás exageró un poco.

-¿Él dice eso?

-Sip y me gustaría comprobarlo.

-Dejáme ver si entiendo, ¿quieres conocerme por que Oliver habla bien de mí?-Preguntó entre risas.

-Me gusta conocer a la gente que mis personas favoritas quieren, mi tío Rin tiene a Hiori y yo lo quiero mucho."

Por lo que ese día a Aiku le pareció raro que Sendou quisiera conocer a Takeshi pero no le negó el capricho.

A Sae tampoco le desagradó la idea, después de todo, luego de los eventos ocurridos hace nueve años, Aiku fue quien se quedó a su lado todo el tiempo, le alegraba que Sendou por fin le hiciera caso, así que les abrió las puertas de su casa.

Luego de una agradable comida y de un interrogatorio por parte de Takeshi con preguntas triviales para Sendou como su color favorito o a que se dedicaba, Takeshi se ocultó para escuchar alguna conversación entre omega y beta.

-Tu hijo es maravilloso Sae, no puedo creer que lo conozca hasta ahora-Le dijo mientras el mismo le pasaba la vajilla para ayudarlo a secarla.

-Lo es, es mi mayor orgullo, es tan inteligente y adora conocer todo el mundo, cuando crezca será un genio sin que nadie lo detenga-Sonrió imaginando las posibilidades de ver crecer a su cachorro, sería una experiencia inolvidable.

-Y se parece tanto a...-Sendou detuvo sus palabras al ver al Itoshi bajar la mirada y alentar sus movimientos.

-A Ryu, estoy al tanto de que es todo él, es cómo si hubiese nacido otra vez en mi hijo, sus ojos... son tan rosas y brillantes como los de ese demonio calenturiento y su piel es igual de morena que él-Miró a Sendou-Tampoco puedo dejar pasar por alto que Shidou Ryusei es su padre ¿sabes? Tiene tanto de él, ahora lo entiendo mejor, odiaba todo eso pero amo a mi hijo por que también viene de mí.

-Oh Sae, lo siento no debí sacar el tema.

-Está bien, después de todo... todas esas características son lo que me hicieron enamorarme de Ryu.

Takeshi no entendió la mitad de la conversación, pero eso le ahorró el tener que convencer a Sendou de hablar.

Y al menos ya tenía un nombre.






¡holi!
¿qué tal les parece hasta ahora?
Cualquier crítica constructiva es bien recibida💕


T a k e s h i   《Ryusae Omegaverse》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora