Yes, daddy (Gay) +18 || 2

00

Wil

Seguía acostado en mi cama aunque mi alarma ya haya sonado hace unos minutos, pero me gusta simplemente ponerme a pensar por las mañanas y escuchar esos suaves pasitos por el corredor luego de mi alarma.

Mis pequeñas princesas, Zoe y Nahary, como cada mañana, abren con cuidado mi puerta, luego la cierran y con pasitos suaves se van acercando a mi para luego subirse a mi lado y tirarseme encima.

— ¡Papi! —gritó Zoe.

— ¡Api! ¡Api! —dijo mi pequeña Nahary.

Zoe es mi princesa mayor con ocho años y Nahary es mi princesa pequeña de 3 años.

Yo aun no abría los ojos y sabía que mis dos pequeñas iban a hablar mal de mi, son como mis pequeñas haters.

— Api e muy peludo.

— Si, ¡yuck! Hay que cortarle sus pelos del pecho con una tijera. Así como tu pelo Nahary.

Eso me agarró desprevenido y abrí los ojos para verlas asustado y fue cuando lo noté.

Mi pequeña Nahary se habia mochado su cabello y ahora parecía una de sus barbies.

— Dios mio, Nahary, ¿qué has echo? —toqué su cabello todo disparejo.

— ¿Te uta? Es un cambio de look api.

— Sigues linda mi princesa, pero, eso no se hace, y menos tu sola, pudiste haberte lastimado ¿entiendes eso? Y tu, Zoe, guarda bien tus materiales, ¿okay?

— ¡Si, papi!

...

Había llegado más que tarde a mi trabajo, tuve que pasar primero por la peluquería para que arreglaran el pelo de Nahary y luego las dejé donde mi hermana Camila qué las cuida gustosa.

— Oye viejo, llegas temprano, eh.

— No molestes Joy, tu has de haber mal influenciado a mi mi hija, te conozco.

Él me veía con falsa indignación y yo solo le lancé una mala mirada.

— Eres un idiota, tienes suerte en ser mi mejor amigo.

Él hizo un gesto que nunca había visto.

— Ah, claro, Wil. —y luego solo se alejó a dirección al baño.

Joy Lewis es mi mejor amigo desde que tengo memoria, nos criamos casi juntos, pero, desde hace unos meses, ha estado más distante, y solo llega a ver a las niñas y nada más, y su distancia me resulta extraño para mi.

Hace un par de años junto con Joy que trabajamos como profesores en una universidad. Joy es profesor de matemáticas y yo de psicología, y así es como se me hace fácil leer a Joy cuando algo le incómoda, y por alguna razón, ese algo, soy yo.

— ¡Hola, profesor!

— ¡Nil! Qué gusto me da verte por aquí, ¿otra vez se pelearon? —si, cuando Nil pelea con Asher, solo sabe venir a la universidad en sus días libres porque le tiene miedo a su esposo.

Yo solo sé reírme por él, ya salí de esa etapa de esposo y no creo volver ahí.

— ¿Con Asher? No, como crees. —claro que se pelearon, aun lo veo temblando.— En fin, solo quería invitarte a ti y Joy a una pequeña cena por el día del San Valentín que mi esposo y yo organizamos.

— Me parece genial, tú comunicale a Joy ya que siento que últimamente me evita.

— ¿No te das cuenta? —preguntó y me miró entre nervioso, como si no pudiera decirlo.

— ¿Notar qué? —pregunté dudoso.

— Si lo digo Asher me matara, y aun quiero seguir vivo. Bueno, mira, te daré una pista, es sobre el día de San Valentín, con eso tu sabrás, y yo me voy, que mi esposo está como una bestia.

Solo se alejó dejándome con una duda.

¿Qué es realmente lo que le pasa a Joy?

Algo dentro de mi lo sabe, pero aún no sé si en verdad quiero admitirlo o si solo estoy pensando mal, pero al yo ser psicólogo, puedo leer las actitudes de una persona, y descifrar el por qué de su comportamiento, y solo me quedó una explicación para Joy.

Él está enamorado, pero de mi.

.
.
.
.
.
.
.
.

Holissss, ya volví, y con esta historia que me han pedido de Wil y Joy, espero les guste estos dos personajes curiosos.

En unos días subiré el siguiente capítulo porque quiero tenerlos al pendiente con esta historia al igual que con las demás.

Un beso a tod@s.