death cast;; [Island of the Slaughter]

03. Overgrown Sadie

Regla número 3: se consciente de las diferencias.

DÍA CUATRO.

15 de marzo de 2007

Nadie duerme esa noche.

Tyler es lo que sólo puede describirse como un desastre. No cena (aunque son dos malvaviscos, pero aun así, normalmente le encantan) y no usa el baño. No habla con nadie. Se acuesta en la litera de Lindsay (ella dormía en la parte inferior porque odiaba las alturas, y está en el extremo izquierdo de la habitación) y mira las tablas de madera, con el dolor cosido en sus rasgos.

En mitad de la noche, cuando abre la cremallera del bolsillo para sacar otro pañuelo de papel, descubre que las margaritas han empezado a marchitarse.

Cuando puede, DJ se sienta rodeando a Tyler con su brazo, tratando de ofrecerle palabras de cierto consuelo. Katie y Sadie también se unen a él a veces. No eran cercanos a Lindsay pero la conocían. Los tres intentan que Tyler coma algo, pero es inútil. Se niega a comer.

—¿Porqué ella? —Es todo lo que le susurra a DJ esa noche. —¿Por qué tenía que ser ella?

—Lo sé. Lo sé.

—Es mi culpa.

—¿Qué? —DJ aprieta con más fuerza a Tyler. —No. No fue tu culpa. Fue culpa del asesino.

—Pero ella estaba justo detrás de mí-yo-debí haberlo comprobado-

—Tyler —Dice DJ reconfortante con esa suave voz suya. —Lo que pasó no fue tu culpa. No sabemos cómo Lindsay logró perderse así porque, como dijiste, estaba justo detrás de ti. Así que no puedes culparte a ti mismo, hombre. Nada de lo que pasó fue culpa tuya.

Tyler no dice nada porque, en su opinión, fue su culpa. Lindsay estaba... bueno, ella no era su novia, pero innegablemente había una conexión entre ellos. Debería haber sido más protector con ella. Debería haber podido darle esas margaritas cuando el reloj de Cody sonó para señalar la medianoche.

Pero no pudo.