Capítulo 5.2

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-Ariadnna, un gusto-ella me mira de repente sorprendida y yo abro mis ojos como platos cuando me abraza fuertemente, miro interrogante a Ian y él solo sonríe

-Oo, tu eres la que salvó a nuestra Ágatha-aaa, ya entiendo, la abrazo un poco sonriendo

-No diría tanto, los médicos hicieron un gran trabajo-se separa un poco y me aprieta la mejilla haciendo que me ruborice y ría

-¿Siempre es tan modesta?-le pregunta a Ian soltándome y él niega con la cabeza

-A cada hora del día-le doy una patada suave y él se ríe

-Oye, dale mis felicitaciones al chef, en serio, esto parece echo por los dioses-le digo a Federico y él sonríe

-La tienes al lado-miro a Gretta sorprendida

-Pues en serio, mi felicitaciones más sinceras, nunca había probado nada parecido

-Un gusto que te guste-todos hablamos un rato hasta que decidimos volver

-Me gustan tus tíos

-Y tu a ellos, una ocasión vine con una novia y uff, se cayeron remal, no duramos ni una semana-sonrío y voy a hacer un comentario divertido cuando siento unos pasos bien conocidos, me giro sobresaltada y veo a papá

-¡Papá!-exclamo cuando me abraza y me besa la cabeza- ¿Qué pasa?¿estás bien?

-Ian, ¿tienes alguna familia alejados de aquí?-miro confusa a papá

-Si efectivamente, tengo una familia en...

-¡No!, no me lo digas-me empiezo a preocupar

-¡Papá! ¿Qué pasa?

-Llévate a Ariadnna contigo por unos días-lo jalo por el brazo haciendo que me mire

-¡Dime que pasa!

-No puedo, solo sé que con él vas a estar más a salvo que conmigo

-¡Papá! Ian no puede dejar a su familia así como así, además ¿qué hay con mamá, con la escuela?

-Yo arreglaré todo, lo prometo, ahora solo confía en mí por favor-sus ojos me suplican

-Pero...-siento una mano tomar la mía y veo a Ian negando

-De acuerdo señor, yo la cuidaré, lo prometo-papá asiente fervientemente e Ian me mira-Vamos-jala de mi mano suavemente

-Papá esto es una locura

-Todo irá bien hija-besa mi coronilla y yo resignada subo a la moto luego de poner mi casco, Ian le hace una seña con la cabeza a papá y al poco la moto está en marcha pero yo no dejo de mirar a papá por encima de mi hombro y mi corazón se inquieta aún más cuando no lo puedo seguir viendo. Me aferro a la espalda de Ian con fuerza. No sé cuanto tiempo pasa pero yo ya no puedo más con la revoltura de mi estómago.

-Ian, detente un momento-siento su cuerpo como se tensa mientras sigue mi pedido, me bajo de un tiro y cuando quito el casco me inclino y vomito todo lo que tenía en la barriga por los benditos nervios, Ian se inclina a mi lado y acaricia mi espalda con movimientos circulares, yo desecho absolutamente todo a la orilla de la carretera, y cuando termino él me brinda un pañuelo negro, limpio mi boca que sabe asquerosa y suspiro mientras seco mis lágrimas lo mejor que puedo.

-Ey, ven-Ian me levanta y me abraza y yo hundo mi cabeza en su pecho mientras me derrumbo

-¿Y si les pasa algo? ¿y si...?

-Ey-alza mi rostro, haciendo que veo sus ojos decidos-Todo va a ir bien..

-Eso no lo sabes Ian-suspira

Quiero que Vivas!!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora