"Ayuda"

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Eran las 9.45 AM, el sol iluminaba las hojas de los árboles ubicados en el patio Anderson, la brisa de primavera rozaba las mejillas rojas de Lev, este se encontraba apoyado en el marco de la ventana, observando como su agresor cruza el patio delantero.

-Mhm, otra tarde con el demonio. Espero que hoy no me toque ni un pelo, o quien sabe ojalá me mate hoy.

A lo lejos se oye una puerta abriéndose, era Simon, un hombre robusto, muy alto, de cabello castaño, se lo observa malhumorado, caminando a pasos agigantados.

-¡hey, Bastardo! ¿Ya tienes mi maldito desayuno? Si no lo haces juro que está noche no caminaras. -Dijo mientras señalaba a su presa con el dedo índice-

-Sí cariño, está todo sobre la mesa y caliente tanto como te gusta, ¿Deseas algo más? -Dijo con un tono arrogante-

El demonio robusto se levanta furioso, arrojando los platos recién hechos al suelo como si de basura se tratara y dirigiéndose a su presa, Lev.

-¡¿QUIEN TE CREES QUE ERES HIJO DE PUTA?! ¿EH?! TODAVÍA TIENES LAS AGALLAS PARA CONTESTARME! -Furioso-

-¡No! No Simon, tranquilízate por favor, solo estaba bromeando... -Dijo mientras las lágrimas caían de sus ojos azules-

Simon estaba furioso, como si de un león se tratase, arremetió contra Lev quien siempre se encuentra indefenso y lo tomó por el cuello...el timbre de la casa resonó causando un silencio pesado.
Simon se acercó lentamente al oído de Lev mientras le susurraba lo siguiente: "Llega a ser alguno de tus hijos y te salvas por esta vez, maldito zorro". Mientras tanto lo suelta, Lev se limpia las lágrimas dirigiéndose a la puerta, era su hijo mayor Timothy, un hombre bastante alto, de cabellos largos negro azabache y una musculatura visible, se lo veía intrigado y decepcionado.
El pelinegro entró a la casa y observando todo detalle a su paso dirigió la mirada hacia su padre Lev.

-Papá, lamento llegar en este momento pero necesito que hablemos en privado, es sobre lo que te sucede. -Observando a su padre con pena-

Lev tenía una gran intriga por hablar de nuevo con su hijo, dirigió la vista hacia simon y este solo observaba con ojos de furia a Tim, con el cual siempre tuvo una relación violenta de insultos y casi llegando a golpes.

-No lo sé hijo, estoy un poco ocupado ahora como para hablar de mi mismo mi amor. -Dijo mientras regalaba una pequeña sonrisa falsa-

-No te pregunté pa, te lo pedí, ven conmigo a tu habitación por favor. -Dijo en un tono serio mientras se adentraba al domicilio-

La escena se volvió tensa, la vista de Simon derramaba odio, mientras que Tim llevaba a su padre a la habitación para hablar. Simon no podía hacer nada o habría consecuencias.

Lev y Tim se encontraban en la habitación, todo estaba impecable para Tim, aunque le llamó la atención un par de cadenas que se encontraban en las puntas de la cama.

- Pa...¿Qué es esto? ¿Acaso él?...

- Él me encadena para que no escape...siempre me duelen las muñecas y se me dificulta mucho limpiar, aunque bueno, también lo hace para hacerme daño y que no me escape de sus asquerosas manos. -En ese momento Lev estalló con lágrimas gigantes y espasmos en su cuerpo- Lo odio Tim, lo odio, lo quiero muerto pero no sé cómo carajo deshacerme de él.

"Blue Hair"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora