Es nuestro

Capítulo 1

Bueno esta es mi primera historia, es la primera vez que algo como esto, espero que la disfruten.

Las imágenes del inicio no siempre tendrán relación con el capítulo. Aunque creo que está si le queda por la cara de sorpresa...

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—¿Qué demonios? — La expresión en el rostro de Lena era algo que sin duda ella nunca imaginó ver. Cuando pensó en la reacción de su hermosa y sobre todo amorosa novia al darle noticia de todos los escenarios posibles que su mente maquinó ciertamente jamás se cruzó el que estaban viviendo. Los inefables orbes esmeraldas de su pelinegra esos que siempre la observan con ternura, amor y devoción hoy solo reflejaban irá, dolor y decepción.

—Estoy embarazada, Lena— Repitió en un hilo de voz las palabras que le acaba de decir a su novia. Sí era cierto que ella y Lena nunca habían hablado de tener hijos en todos estos tres años cuatro meses dos semanas y 3 días que tenían de relación, tampoco se le ocurrió que su Lee reaccionaría de esta manera.

Quién podría culparla de eso si Lena en todos estos años en que han estado juntas no ha hecho otra cosa que demostrarle su amor, de repetirle día tras día que ella era el amor de su alma, lo más importante de su existencia y su deseo de pasar cada día del resto de su vida a su lado.

Sabía que si le pedía el mundo a Lena su pelinegra se lo daría.

Por eso no lograba comprender cómo es que habían llegado a este punto.

Esto tenía que ser una broma de mal gusto, no podía ser verdad, la misma mujer que la había salvado hace casi 4 años atrás, que la había perseguido durante 45 días seguidos como una muy adorable loca solo para conseguir una cita, la que había pasado casi tres horas fuera de su ventana para hablar después que la dejara plantada en su dieciseisava salida; y pensar que ese fue el día en que Lena le pidió que fuera su novia, no está no podía ser la misma mujer que iba dejar plantados a un grupo de inversionistas sobre un proyecto de cosecha en el desierto hace dos días atrás para llevarla a urgencias solo por un mareó provocado por levantarse algo rápido de la silla y la única manera en que Lena desistió de cancelar la reunión fue con la promesa de su novia de que iría esa misma tarde a consulta.

No, no, no está mujer que ahora la estaba viendo como si fuera lo más bajo que existe en el mundo no puede ser su Lena.

—Dime que es una broma— Puede escuchar el tono de súplica en la voz de la pelinegra.

—Lena entiendo que nunca hablamos sobre tener hijos, pero no comprendo por qué te pones así— El timbre en la voz de la otra mujer tiembla al hablar —Creí que te alegraría saber que seremos madres— La risa sarcástica e incrédula de Lena retumba en la habitación.

—¡Qué me alegraría! — Exclama con furia —¿De qué se supone que deba de alegrarme? ¿De qué me hallas sido infiel? —

—Pero, pero ¿Qué diablos estás diciendo? Yo nunca te he sido ni te seré infiel Lena—

—Si lo que dicen en estos exámenes es cierto, ya lo has sido. Ese bebé no es mío—

Ahora era la mujer frente a Lena la que ardía en furia e indignación —¿Cómo te atreves? Si lo que no quieres es hacerte cargo del bebé y asumir tu responsabilidad lo único que debes de hacer es decirlo, pero no me acuses de algo que jamás he hecho o haría—

—Y si nunca me has engañado me quieres explicar ¿Cómo es que llegó ese bebé ahí? ¿O es que ahora eres la Virgen María reencarnada? —

—Pe.... pe...pero ¿Qué carajos? ¿Cómo que explicarte? Sabes perfectamente bien como o ya se te olvido que llevamos más de tres años juntas en las que hemos hecho el amor ciento de veces si no miles de veces en las cuales déjame recordarte que tú nunca quisiste cuidarte. Que según tú por qué no se siente igual, pues qué crees que en una de esas miles de veces las pastillas anticonceptivas fallaron y el bebé es el resultado, aunque sinceramente creí que sería el fruto de nuestro amor. No entiendo Por qué te has puesto así—

—Porque no es nuestro— La rabia con las cuales esas palabras fueron gritadas era evidente, pero también el dolor detrás de ellas solo que con la acalorado de la situación pasó desapercibido —Si estás embarazada no es de mí que lo estás— Y lo último que se escuchó la rubia en el cuarto fue el portazo que dio Lena al salir de la habitación que llevan más de dos años compartiendo.

—Pero si es tuyo. Es nuestro—

Susurró Kara con lágrimas corriendo por sus mejillas a una habitación vacía.

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Con esto llegamos al final del primer capítulo de esta historia original espero que les guste. Aprovecho para aclarar que no será un fic largo, los capítulos en su mayoría serán cortos no obstante hay uno que otro algo larguito.

En verdad espero que disfruten leer el fic tanto como yo de escribirlo. Aún no sé con qué frecuencia actualizaré, sin embargo, les puedo afirmar que no la dejaré sin terminar de hecho tengo los primeros 5 capítulos ya listos.

Por favor si encuentran algún error háganmelo saber para realizar la corrección.