¿Cómo sigues adelante cuando el dolor te consume y la culpa te ahoga?
Clara Clark vive atrapada en un abismo de sufrimiento y dudas. Un accidente del pasado, que no causó ella pero no puede demostrar, ha marcado su vida de manera irreversible. La cu...
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Clara
Dos palabras, Doctora Cassia.
Nuevamente me encuentro aquí en el consultorio dentro de la sala de espera. Hoy oficialmente empiezan mis terapias, para tratar mi agorafobia contra todo pronóstico dado.
La doctora Cassia, "Mi 'psicóloga" intentó, y digo intentó, porque realmente lo hizo, explicarme en una breve charla de cuarenta y cinco minutos de que todo sería fácil y que no me sintiera presionada nunca por nada.
Observo a Marcus por el rabillo del ojo, él mantiene una expresión firme mirando al frente, Rose le había dado la responsabilidad a Marcus de traerme a mis terapias y no dejarme sola en el proceso.
Mi guardaespaldas vuelve su atención a un libro que tiene en las manos y bufa cerrándolo con evidente frustración ahora marcada en sus facciones.
—¿Por qué el asentó alemán es tan difícil? —Murmura cuando guarda el libro.
—No es tan difícil, solo te falta algo de práctica— digo tomando el libro de sus manos para darle una ojeada rápida—. Wir wurden geboren, um Fehler zu machen und daraus zu lernen, und nicht, um so zu tun, als wären wir perfekt.
"Nacimos para cometer errores y aprender de ellos, no para pretender ser perfectos."
Leo en voz baja con mi perfecto alemán y Marcus me mira estupefacto y con alguna emoción en sus ojos ¿Admiración quizá?
—Espero realmente que no me hayas insultado en alemán.
Me empecé a reír y negué con la cabeza.
—¿Porqué te insultaría en alemán, si lo puedo hacer en español? —bromeo—. Incluso me entenderías perfectamente.
—Te odio, Clara— negó con burla evidente en su mirada.
—El sentimiento es mutuo, Marcus.
Blanqueó los ojos y me arrebato el libro de las manos.
Sin ningún otro tema de conversación tomo mi teléfono del bolsillo de mi pantalón y abro la aplicación que Marcus ayer me enseño para animarme a escribir.
Amo leer y escribir, el diario junto a mi mesa de noche es testigo de los mil temas que quisiera escribir en un futuro, las cientos de ideas decoran las páginas de aquel cuaderno secreto para mí.
Ya en la aplicación comienzo a ojear los cientos de libros que encuentro y la cantidad de visitas que tienen la mayoría me hacen abrir los ojos, finalmente decido cambiar mi nombre de usuario ya que, el día de ayer solo tuve tiempo de poner uno aleatorio.
¿Nombre de usuario? Obviamente, Clara Clark.
¿Escritora o solamente lectora?: Ambas.
Bienvenida Clara Clark.
La bienvenida a la aplicación o, mejor dicho, al mundo de la escritura me lo estaba dando un pequeño letrero en una aplicación que oficialmente hoy sería mi segundo día usándola.