El regreso de los merodeadores -COMPLETO-

Capítulo 10

A / N: Bueno, aquí está el próximo capítulo. Tengo problemas con mi correo electrónico, así que no pude enviárselo a mi Beta Reader. Espero que no haya demasiados errores. Tenía muchas ganas de sacar este capítulo.

Sirius podía decir por la mirada en los rostros de sus alumnos de séptimo año que estaba a punto de ser bombardeado con docenas de preguntas que no tenían nada que ver con lo que era la clase acerca de. No había un escritorio que no tuviera las mañanas Daily Prophet, con la excepción de los cuatro asientos vacíos que pertenecían a algunos Slytherin desaparecidos. Escaneó la clase y notó que los estudiantes de las Casas que estaban presentes estaban agrupados. La excepción fue que Longbottom se sentó aparte de sus compañeros de casa. Él emitió un aire que dejaba la impresión de que estaba arriba sentado con ellos. Los otros Gryffindors no parecían tan desconsolados al respecto.

La puerta del aula se abrió y entraron tres Slytherin de aspecto pomposo. Un niño grasiento de cabello blanco lideró la manada. Se parecía demasiado a su padre como para ser alguien más que Draco Malfoy. Sirius pensó en su prima Narcissa, y se alegró de que al menos pudiera escapar de esa vida.

"Sr. Crabbe, Goyle y Malfoy, aunque en algunos círculos podría ser aceptable llegar tarde a la moda, mi salón de clases no es uno de esos lugares. Ahora, baja y dame veinte flexiones."

"Qué? No haré tal cosa. Soy un malfoy. Debes confundirme con un mago común como Weasley."

"Bueno, si ustedes tres carecen de la fuerza física para hacer una simple flexión, ¿quién soy yo para señalar sus defectos? Te lo dejaré a ti, para explicarle a tus compañeros Slytherin cómo perdiste cincuenta puntos cada uno en tu casa." Sirius lo agitó cuando se volvió para caminar hacia el frente de la clase. Su amplia sonrisa estaba bien escondida de la clase. A sus compañeros Slytherin les tomó un total de diez segundos de miradas asesinas para que cumplieran con el profesor Black. Draco, por supuesto, fue el último en caer al suelo.

"Ahora, Sr. Weasley, ¿podría venir aquí."

"Oi! ¿Qué hice?" Ron saltó de su asiento y respondió con una voz que era una octava más alta de lo que pretendía que fuera. Hermione puso los ojos en blanco sobre él y luego lo empujó hacia el profesor Black.

"Nada, pero como el Sr. Malfoy aquí eligió dispararte, pensé que era apropiado que me ayudaras a administrar la disciplina." Ron miró a Draco, cuya cara estaba a los pies de Ron, y le rompió un puño en la otra mano. Hizo un sonido sorprendente y lo siguió apretando el puño en su mano abierta. "Amor a."

"Bien, cuando el Sr. Weasley cuente, ustedes tres bajarán sus cuerpos a una pulgada del suelo. Cuando vuelvas, los tres dirán, No llegaré tarde a clase otra vez, profesor Black. Tengan cuidado, muchachos, si solo uno de ustedes no lo dice, los tres repetirán la flexión. ¿Me aclaro caballeros?"

"Sí, profesor Black."

"Muy bien, llévatelo Sr. Weasley."

"Muy bien ... 1"

"No llegaré tarde a clase otra vez, profesor Black." Crabbe y Goyle dijeron al mismo tiempo. Draco no hizo ningún intento de cumplir.

"Lo siento Malfoy, no escuché eso." Ron se regodeó. Draco recibió dos golpes en sus brazos por parte de sus socios en el crimen.

"Así que ayúdame Draco, si nos metes en más problemas, te venceré yo mismo." Crabbe le advirtió con una mirada que le decía que Vincent significaba negocios.

"Sí, papá ya no está aquí para comprarte problemas." Gregory agregó con una mirada tan feroz como la de Crabbe. Draco comenzó a darse cuenta de que no era tan premonitorio sin la amenaza de su padre.