El regreso de los merodeadores -COMPLETO-

Capítulo 13

Ginny sabía que tendrían que deshacerse de las escobas rápidamente. No podía entender cómo las primeras brujas y magos podían volar en escobas simples. Eran lentos como el pecado, y no podían maniobrar por mierda, además estaba aprovechando en gran medida su magia solo para mantenerse a unos metros del suelo. No obstante, sirvió a su propósito. Estaban a salvo fuera de la habitación y el Equipo Weasley logró llevar a diez de esos bastardos en el proceso. ¡Así que apesta a ese Dumbledore!

"Difícil truco de Gin-Gin." George le dijo a Ginny mientras aterrizaba junto a ella.

"Sí, dinos cómo aprendiste eso?" Fred preguntó mientras aterrizaba al otro lado de ella.

"Recoges algunos trucos como McGonagall's Aid. Ella es una maestra de transfiguración después de todo." Ginny les dijo mientras miraba a la vuelta de la esquina. Después de ver que era seguro, se dirigió hacia abajo con los gemelos a cada lado de ella. Puede que hayan estado siguiendo sus órdenes, pero eso no pareció evitar que fueran hermanos mayores protectores. Fue dulce ... molesto ... pero dulce.

"Creo que deberíamos llegar a la entrada principal."

"Funciona para nosotros", dijeron Fred y George al mismo tiempo.

"Mantén el polvo de oscuridad en tus manos. No sabemos cuántos de esos bastardos hay por ahí. Sería mejor evitar una pelea si podemos."

"Desde cuándo Ginny Weasley..."

"Alguna vez has huido de una pelea?"

"No debes hacer preguntas para las que no quieres escuchar la respuesta", les dijo con amargura en su voz. Al instante supieron que se refería al momento en que Lestrange la llevó cautiva. Malfoy había mencionado que quería presentarla a Voldemort.

George miró por encima de la cabeza de Ginny a Fred. Le dio un asentimiento afirmativo. Lo que quisieran con su hermana pequeña, Fred y George morirían antes de dejar que eso le sucediera. Los tres continuaron por el largo pasillo. Ginny estaba agradecida de que no intentaran sacarle más información. Esa fue una conversación que quería evitar a toda costa.

Tonks fue uno de los primeros Aurors en llegar al callejón Diagon. Le dijeron que respondiera a un disturbio. Por la gran cantidad de patronos que se enviaron al Ministerio, lo más probable es que los comedores de la muerte causaran daños a la propiedad como muestra de fuerza, o en respuesta a lo que hizo su primo el día anterior.

En el pasado, recordaba que los Mortífagos generalmente aparecían o se alejaban tan pronto como llegaron los Aurors. Ella esperaba que esto terminara rápidamente. Cuando llegó allí, sabía que eso nunca iba a suceder. Alguien había puesto una sala anti-aparición. Terminaron a las afueras de la entrada principal. La gente se estaba quedando sin The Leaky Cauldron en Hordas. Las madres se aferraban a sus bebés hasta los senos mientras corrían por sus vidas. Algunas personas fueron pisoteadas en el proceso. Por falta de una palabra mejor, fue una histeria colectiva.

Tonks sabía que no había forma de que ella y sus compañeros Aurors se interpusieran de esa manera. Sin embargo, esa no era la única forma de entrar. Una entrada secundaria que usaron los sacó de Flourish & Blott's. Lo que vieron fue algo de una mala película de muggle con calificación B. Los Trolls de Alcantarillado estaban saliendo de un enorme agujero que estaba en el medio de la carretera. Iban arriba y abajo de la calle atacando cualquier cosa que se moviera. En el cielo de arriba, los gárgolas se bajaban de las cubiertas para arrebatar a las víctimas. En los escalones de Gringotts había un gran pelotón de orcos listo para matar cualquier cosa que intentara salir o entrar al banco. La Marca Oscura se alzaba en el cielo ennegrecido de arriba.