El regreso de los merodeadores -COMPLETO-

Capítulo 54

Esta era la calma antes de la tormenta que Sasha pensó mientras estaba sentada en una cama en la Guarida de los Merodeadores esperando que le miraran su turno. Parecía que sería bastante hasta que eso sucediera. Había otros con mayor necesidad que ella. Los ataques de Death Eater ocurrieron en toda Inglaterra esta noche. El DMLE estaba ejecutando a su gente harapiento para tratar de combatir esta grave amenaza. Esta sala estaba llena del producto de sus esfuerzos. El número de heridos fue tan grande que este gran grupo representó a St. El desbordamiento de Mungo, Sasha odiaba pensar cuántos habían perecido esta noche ya.

Miró mientras la segunda generación de merodeadores de Harry respondía a la llamada de ayuda. Mientras los años más antiguos luchaban para proteger al Consejo de Ancianos, los años más jóvenes estaban aquí ayudando con la atención y el tratamiento de las víctimas. O bien, era la elaboración o el embotellado de pociones muy necesarias, la aplicación en los salones de curación y, en algunos casos, la realización de hechizos de curación a los heridos. No vacilaron en las tareas que se les dieron.

En un rincón lejano de la Guarida yacía a los caídos. Entre ellos estaban los cuerpos de Remus y Fleur, un amargo recordatorio de que incluso los Merodeadores no eran intocables. Con la desesperación llegó la esperanza, y nadie lo sabía mejor que Molly Weasley. Se sentó junto a la cama de su hijo mayor agarrando su mano hacia su seno mientras rezaba al cielo para que se salvara. Estaba durmiendo profundamente y no se despertaría hasta varias horas después. Dilys se aseguró de eso.

El sanador legionario y la directora reconocieron la mirada en sus ojos inmediatamente después de que él levantó el témpano para recibir a los heridos de St. Mungo's. Había visto esa mirada embrujada demasiadas veces en su vida para olvidarla. Hombres jóvenes con corazones rotos que buscan la muerte bajo la bandera de vengar a los seres queridos perdidos. Ella no conocía a esta chica, pero Dilys estaba segura de que si le preguntaban a Fleur hubiera querido que viviera para ella. Con el tiempo y el amor de su familia y amigos, Bill lo vería. Dilys siempre vio como su deber sagrado ver que él tuviera ese tiempo, por lo que se requería un engaño. Cuando Bill descubrió que había bebido un Dreamless Sleeping Draught en lugar de una Poción curativa, estaba demasiado cansado para soportar mucha resistencia.

Tonks, por otro lado, había demostrado ser más un desafío. Se recuperaría por completo de su lesión en la cabeza, pero como Bill había tomado decisiones precipitadas esta noche, ella también estaba durmiendo, pero con su conmoción cerebral necesitaría revivirse periódicamente. Dilys dudaba seriamente de que pudiera detener a un Auror completamente entrenado si la mujer decidía irse, y por razones muy similares a las del Sr. Weasley. Afortunadamente, Sirius la ató a la cama para que no pudiera irse y le dio su varita a McGonagall para que la guardara.

La mujer había tomado el control de la Orden del Fénix, y actualmente les estaba dando órdenes sobre lo que quería que se hiciera. Eso es con la excepción de Alastair Moody y Severus Snape. La escalera tenía daños internos severos, por estar muy probablemente bajo la Maldición Cruciatus demasiado tiempo. Eso y pasar por el floo en esa condición no lo ayudó mucho. El dolor que sufrió el hombre debe haber sido inmenso.

Madame Bones revivió y lanzó Moody. No es que ella quisiera, sino porque necesitaba desesperadamente su experiencia y habilidades en la batalla. El hombre todavía creía que Dumbledore era su mejor apuesta para ganar la guerra, incluso después de que se le revelara la verdad sobre el hombre. Sin embargo, toda una vida de defensa de la ley y el orden entraba en conflicto con esa creencia. La gente moría y ese siempre sería su primer deber. Amelia y Alastair tenían una alianza incómoda en el mejor de los casos, pero seguía siendo una alianza, al menos hasta que terminara esta crisis, y luego todas las apuestas estaban canceladas.