♤Nuestro Omega Rebelde♤ 《Omegaverse》

🥀♡Capítulo 6♡🥀

Luego de un largo baño, Noah regreso a su habitación con ayuda de una bata que Kilnis le presto, era de terciopelo negro. Las sirvientas le dieron comida y un buen ungüento para su dolor de caderas y espalda.

Cuando por fin estaba en su habitación, se dejó caer de cruces en la cama, mirando el techo con cansancio. Noah estaba verdaderamente destrozado desde que tuvo sexo con Kilnis, además de que su enojo con su lobo era enorme, ese idiota se dejó llevar por el placer y terminó teniendo sexo toda la noche. Había pasado tanto tiempo sin que su cuerpo haya tenido relaciones sexuales, tanto que ahora recordaba lo terrible que era estar después de hacerlo.

Pero se daba cuenta que Kilnis era mucho más grande y fuerte que su ex pareja, principalmente en su pene.

Si era así su pene, ¿cómo sería el de los demás? Con sólo pensarlo le daba miedo lo que podrían hacerle a él o a su cuerpo.

- "Debería ponerle un candado a mi culo..." - Pensó, pues podría ser muy mortal para él.

Suspiro, se dio la vuelta y escondió su rostro en las suaves almohadas de la cama, aspirando el aroma que estas desprendían, calmando su reciente enojo.

De pronto, unos golpes cerca de la puerta destruida se oyeron, Noah retiro su rostro se las almohadas y vio a una sirvienta que lo miraba un poco ansiosa. Smith suspiro, se levantó de la cama y se acercó a una distancia promedio de la chica.

La miro unos segundos con expresión agotada, pero decidió dar su mejor sonrisa y preguntar.

- ¿Pasa algo?

La chica se sorprendió un poco, pero recobro el sentido y asintió, Noah hizo un ademán para que hablara, lo cual ella acato.

- Disculpe si lo interrumpí, joven Noah, pero le tengo que dar una noticia. - Dijo ella, mientras se acercaba un poco más y se preparaba para continuar. - L-La señora Gohragath vendrá aquí en unas horas... Es recomendable que se prepare para verla.

- ¿La señora Gohragath? - Pregunto desconcertado.

- Es la madre de su majestad, Kilnis, la anterior reina de nuestro reino. Recientemente se entero de su llegada aquí, por lo que mando una carta a su majestad diciendo que vendría lo más pronto posible.

El Omega solo pudo suspirar con cansancio, sinceramente no quería ver a nadie. Noah estaba demasiado cansado desde ayer, por lo que iba a rechazar la solicitud cuando se escucho un estruendo no muy lejos y gritos furiosos.

La chica miró a Noah con suplica, pudiendo con la mirada que se preparará inmediatamente.

El mayor apretó los dientes molesto, pero se contuvo para no asustar más a la pobre chica.

- Salgo en unos minutos. No tardaré.

La chica asintió temblorosa, alejándose rápidamente de la vista del mayor para darle su espacio y no incomodarlo mientras se cambia de ropa.

El mayor volvió adentro de su habitación, yendo hacia el armario y escogió un par de prendas que le favorecían, según él. Se puso una camisa azul oscuro y abrió un par de botones del pecho. También se puso unos pantalones blancos con bordes dorados. Al final, se puso unos calcetines blancos y unos zapatos de cuero negro.

Peino un poco su cabello para que no se viera tan desordenado, además de que también se volvió a poner el collar protector en caso de cualquier problema.

Salió del armario y dejó su habitación para ir a la sala del trono, pues desde ahí se escuchaban los gritos y estruendos. Cuando llego a la sala del trono, vio como había una mujer parecida a Kilnis, solo que sus ojos eran verde lima y en la punta de su cabello tenía un tono más celeste que azul oscuro. La mujer llevaba un vestido largo de color blanco con una especie de cinturón de perlas y conchas de mar de distintos colores y tamaños. Tenía una gran corona de objetos marinos, tales como conchas, piedras, joyas y estrellas de mar.