El Maestro Hiperactivo y Cabeza Hueca Número 1

Capitulo 2: Una Cuestión de Hecho

Descargo de responsabilidad: No soy el propietario de Naruto ni de Pokémon. Si lo fuera, no estarías leyendo esto ahora mismo. Estaría descansando en la selva canadiense contando mi dinero, haciendo snowboard y entrenando con Georges St. Pierre y todos los demás famosos canadienses de Artes Marciales Mixtas porque me gusta entrenar para luchar, tendría los recursos para mudarme a Canadá y permitirme entrenar en los mejores lugares, y estaría completamente aburrido en mi temprana jubilación después de conquistar el mundo.

Capitulo 2: Una Cuestión de Hecho

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trabajo sea mostrado!"

Naruto puso los ojos en blanco pero hizo lo que su maestro le pedía, "¡Si lo pides lo tienes Ero-sennin!". Tan rápido que ni siquiera se le vieron los dedos haciendo el sello con la mano, Naruto creó más de una docena de Kage Bunshin que se dispersaron por todo el barco tratando de desorientar a Jiraiya entre los vítores de los marineros que se dieron un respiro para ver como Naruto trataba de poner en práctica su entrenamiento.

Antes de que fuera demasiado tarde para actuar, Jiraiya formó unos cuantos sellos de mano y activó su siguiente jutsu, "¡Hari Jizo (Aguja Jizo)!" El largo y espigado pelo blanco de Jiraiya creció alrededor de todo su cuerpo y se endureció justo cuando los clones de Naruto le lanzaban shuriken de múltiples tamaños. En lugar de hacerle daño, sólo rebotaron en su duro y afilado cabello como si estuviera hecho de metal, "¡Ho ho! Eso es peligroso ya sabes".

"¡Cállate!" Los clones ladraron al unísono antes de renovar su ataque con un enfoque diferente. Parecía que todos iban a lanzarse al ataque, Jiraiya estaba a punto de reprender a Naruto por su falta de estrategia que supuso le había metido en la cabeza al enfrentarse a un oponente superior para entonces, pero todo cambió cuando vio una bocanada de humo a sus pies. Dos de los grandes shuriken de Naruto se transformaron en el propio chico, pareciendo que iban a preparar un Rasengan.

"¡Hari Jigoku (Infierno de Agujas)!" Las agujas salieron disparadas del pelo de Jiraiya y golpearon no sólo a los dos Narutos que estaban preparando un ataque, sino a los Narutos de todas partes. Incluso los marineros tuvieron que ponerse a cubierto para evitar ser alcanzados por el jutsu mientras se agachaban detrás de cajas, barriles, cualquier cosa que pudieran encontrar. "Uy. Lo siento." Dijo avergonzado antes de notar que no había golpeado al verdadero Naruto. Los dos que preparaban el Rasengan habían sido clones.

Maldito pequeño bastardo estaba mejorando en el uso de esos clones para desgastar a la competencia sin ponerse en peligro. Al parecer, ser golpeado periódicamente durante dos meses le enseñó a mirar antes de saltar, por así decirlo. Entonces, ¿dónde estaba?

Mirando alrededor de la cubierta, los ojos de Jiraiya se posaron en el recientemente obtenido Growlithe de Naruto, que estaba obedientemente sentado a un lado entre los marineros, simplemente observando el combate entre los dos, jadeando excitado por la acción. El perro del mocoso tendría que saber dónde estaba. Los perros tenían algún tipo de vínculo con sus amos que les hacía buscarlos todo el tiempo, ¿no? Tenía que ser de alguna ayuda, "¿Dónde está muchacho?" Jiraiya dijo con voz de bebé condescendiente, "Vamos, ¿dónde está el mocoso? ¿Dónde está tu dueño?" Dijo, dándose la vuelta para señalar a través de la nave esperando que el perro volviera cuando señalara el lugar correcto.

¡No gustándole exactamente la voz de bebé y viendo una vez más la ondulante cola de caballo blanca contrariándole cuando Jiraiya se dio la vuelta, Ranbouen dejó de estar tan contento y gruñó a Jiraiya, pareciendo que estaba a punto de levantarse y atacar mientras ladraba enfadado al sabio de mediana edad, "Grrr-Growl! Growlithe!"