Capitulo 23: El Rostro del Enemigo

58 4 1
                                    

Descargo de responsabilidad: No soy el dueño de Naruto ni de Pokémon. Nadie es dueño de Pokémon. Pokémon es tu dueño.

O al menos es dueño de tu infancia.

Capitulo 23: El Rostro del Enemigo

------------------------------------------------------------------------------------------------

Decir que a Silver le había sentado mal el matón del Team Rocket que había intentado venderle una cola Slowpoke era quedarse corto. El mal humor que le había causado su derrota a manos de Naruto iba de la mano con su aversión original al Equipo Rocket, y sólo se había visto reforzada por el desaire a su capacidad de entrenamiento, que alguna vez necesitó un estímulo ilegal para mejorar el entrenamiento al que sometía a sus Pokémon, por involuntario que fuera dicho desaire.

En cualquier caso, sólo había un lugar en Johto al que alguien pudiera acudir para llevar a cabo una operación de mercado negro como la venta de colas del Pokémon Slowpoke.

Ciudad Azalea y el Pozo Slowpoke que albergaba.

A pesar de llamarse pozo, lo único que tenía de pozo era una gran cantidad de agua almacenada. Después de bajar la escalera por la abertura, parecía más bien una enorme caverna. Haciendo honor a su nombre, Slowpoke era la raza de Pokémon que se podía encontrar nadando en el agua o sentado con cara de bobo en las rocas y caminos de piedra que llenaban el lugar.

El guardia de arriba estaba completamente fuera de sí cuando intentó arrojar su peso e impedir que Silver entrara. Un solo Zubat y un Koffing no habrían bastado para derrotar ni a uno solo de sus Pokémon en su peor día.

Una vez dentro, supo con certeza que había elegido el lugar correcto. Había todo tipo de Slowpokes sin cola por todas partes.

Eso habría justificado la patada en el culo que les dio a los gruñones del Equipo Rocket apostados allí para recolectar colas, pero Silver pensó que no necesitaba ninguna justificación para romperles el cráneo. Con que fueran del Team Rocket le bastaba.

"Cuchillada". ordenó Silver, viendo cómo su Sneasel acuchillaba al miembro del Team Rocket que había creído buena idea enfrentarse a él solo después de ver caer a todos sus amigos. Su Pokémon ya había sido derrotado, pero eso por sí solo no le bastaba. "...No puedo creer que mi padre os eligiera a vosotros, debiluchos, en lugar de...".

No, no había necesidad de pensar en eso. Giovanni seguía siendo su padre, aunque nunca lo hubiera buscado después de que se lo llevaran. El Team Rocket lo distrajo de encontrarlo. Eso no significaba que su padre no le hubiera echado de menos, significaba que había asumido lo peor en cuanto al destino de su hijo.

De cualquier manera, no importaba. Su padre estaba muerto, sabía quién lo había matado y tenía que prepararse para acabar con la vida de esa persona.

Para ello, iba a limpiar ese pozo. Además de servir como entrenamiento práctico, era catártico.

Al ver la sangre del miembro abatido del Team Rocket correr hacia el agua, Silver no hizo más que hacer una mueca de desprecio y girar la nariz. Necesitaba más desafíos. Claro, sus Pokémon estaban ganando experiencia y fuerza (su Totodile en particular había avanzado muchísimo), pero Uzumaki Naruto no estaba sentado esperándolo.

Sabía que todo lo que había aprendido del joven estaba desfasado desde hacía más de nueve meses. Su encuentro en Ciudad Cherrygrove demostró lo fácilmente que Uzumaki podía despacharlo en ese momento.

Esto va demasiado lento", pensó Silver mientras devolvía a su Sneasel a su bola. "Necesito Pokémon más fuertes".

"¡Por fin te he encontrado!"

El Maestro Hiperactivo y Cabeza Hueca Número 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora