𝓓𝓮𝓼𝓽𝓲𝓷𝓪𝓭𝓸𝓼 𝓪𝓵 𝓪𝓶𝓸𝓻 (𝚃𝚑𝚛𝚊𝚗𝚍𝚞𝚒𝚕 𝚡 𝚃𝙽)

Nuevo y peculiar

T/N

Es una nueva mañana, específicamente mi primer día de casada, ¿pero que puedo decir?

Me levante y camine hacia el baño para darme una ducha, dormir con alguien más fue muy incómodo para mi así que solo quería despejar mi mente. 

Luego de un largo rato salí, Thranduil seguía dormido así que me apresuré a arreglarme, la noche anterior fue super incomoda así que no quería lidiar con él en ese momento. Estaba cepillando mi cabello antes de observar mi armario, en realidad había muchos vestidos esponjosos y coloridos, pero en el fondo de mi ser, en alguna parte de mi se estaba aburriendo de todo. Bueno, ignoré mis pensamientos y me vestí con uno de mis típicos vestidos y salí de la habitación en busca de distraerme, no sé porque o como, pero sentía una corazonada, como si algo estuviera cambiando dentro de mí.

Caminé por los pasillos hundida en mis pensamientos hasta que mi mirada se topó con la sala de entrenamiento, esa corazonada se hizo más fuerte y decidí entrar en la sala. Al abrir las puertas mire a muchos elfos entrenando con espadas, arcos y esas cosas. Observé mi alrededor con curiosidad hasta que reconocí dos rostros familiares, Tauriel y Legolas.

TN: - Chicos! ¿Qué tal? Ya me sentía perdida aquí con tantos rostros nuevos - Los salude con una sonrisa

Tauriel: - Ya nos lo imaginamos, TN.  Vienes a entrenar? -

TN: - Algo así. Nunca es tarde para probar cosas nuevas -

Legolas: - Por fin te animaste. Tienes buena madera para esto, solo falta tallarla - Guiño un ojo junto con una sonrisa.

Tauriel: - Bueno, no hay que perder el tiempo, TN. Te vamos a enseñar todo lo que necesites. Ven¨- La tomo del brazo entusiasmadamente y los tres comenzaron a practicar con energía. 

TN se sumergió en el entrenamiento con Tauriel y Legolas, tratando de despejar su mente de los recientes eventos y de la incomodidad que aún sentía en su vida marital. Cada día que pasaba, su habilidad con el arco y la espada mejoraba, y a medida que sus movimientos se volvían más seguros, comenzó a notar que algo dentro de ella también estaba cambiando.

Un día, mientras entrenaba en el bosque cerca del palacio, TN sintió una extraña energía fluyendo a través de ella. Durante una serie de movimientos rápidos, notó que sus flechas volaban con una precisión inusual y que sus reflejos eran más agudos. Al principio pensó que era fruto de la práctica constante, pero pronto empezó a sospechar que había algo más en juego.

TN decidió experimentar en secreto. Practicaba en solitario en lugares apartados, tratando de comprender mejor esos nuevos sentimientos y habilidades. Descubrió que podía controlar elementos naturales a un nivel sorprendente: el viento se volvía más fuerte con su concentración, y las hojas se movían a su antojo. Sin embargo, no decía nada a Tauriel ni a Legolas, temiendo que los elfos pudieran considerar que estaba sobrepasando sus límites.

Mientras tanto, la relación con Thranduil se volvía cada vez más tensa. La falta de comunicación y el hecho de que estaban todavía conociéndose creaban una distancia palpable entre ellos. Thranduil, aunque seguía siendo el rey y tenía sus responsabilidades, parecía cada vez más preocupado por cómo manejar su nuevo rol como esposo. TN, por su parte, se sentía frustrada por la falta de comprensión mutua. La noche anterior había sido otra de esas noches tensas, en la que ambos se habían retirado a sus propios pensamientos, sin encontrar el camino hacia un entendimiento real.

Una tarde, Thranduil, al notar que TN pasaba más tiempo en el bosque y entrenando con sus amigos elfos, decidió confrontarla. La encontró en el claro donde solía practicar, rodeada de una ligera bruma que se disipaba lentamente.

Thranduil: - TN, necesitamos hablar. He notado que te has alejado mucho últimamente y me preocupa. -

TN se giró, ligeramente sorprendida por la intrusión, pero decidió mantener la calma.

TN: - ¿De qué quieres hablar, Thranduil? -

Thranduil: - De nosotros. Me parece que estamos creciendo más distantes. Este matrimonio es nuevo para ambos, y no parece que estemos encontrando un terreno común. -

TN: - Lo sé, pero... ¿qué esperas que haga? No me has dado espacio para adaptarme a esta nueva vida. Además, he estado ocupada descubriendo cosas sobre mí misma que ni siquiera entiendo completamente. -

Thranduil frunció el ceño.

Thranduil: - ¿Descubriendo cosas sobre ti misma? ¿A qué te refieres? -

TN no estaba lista para revelar su recién descubierta habilidad, así que optó por ser evasiva.

TN: - Solo... estoy tratando de encontrar mi lugar en todo esto. Me siento confundida y, a veces, abrumada. No sé cómo encajar en esta vida que es tan diferente a la que conocía. -

Thranduil suspiró, su rostro mostrando una mezcla de preocupación y frustración.

Thranduil: - Estoy tratando de hacer lo mejor para ti y para nosotros. Pero necesitamos comunicarnos y ser honestos el uno con el otro si queremos que esto funcione. -

TN asintió lentamente.

TN: - Lo entiendo. Quizás necesitemos un tiempo para ajustar las cosas. Pero, por favor, trata de tener paciencia conmigo mientras descubro cómo manejar todo esto. -

Thranduil la miró durante un momento antes de asentar con la cabeza.

Thranduil: - De acuerdo. Intentaré ser más comprensivo. Pero espero que también confíes en mí y compartas lo que estás pasando. -

TN: - Lo haré. -

Los días siguientes, TN trató de mantener un equilibrio entre su entrenamiento, sus nuevos poderes y su relación con Thranduil. La distancia seguía presente, pero ambos estaban haciendo esfuerzos para cerrar la brecha.

En el campo de entrenamiento, Tauriel y Legolas notaron que TN se estaba volviendo más centrada y confiada, aunque también vieron que había algo que estaba afectando su espíritu. Mientras TN continuaba explorando sus habilidades y buscando maneras de integrarse en su nueva vida, sabía que el camino hacia el entendimiento y la aceptación sería un desafío continuo, tanto con Thranduil como consigo misma.