Las brujas han existido desde que la humanidad existe, siempre entre las sombras susurrando, avanzando con la humanidad y siendo condenada por esta, pero a pesar de esto se han sabido mantener y seguir adelante y eso es justo lo que pasa con el aque...
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Los demonios están constantemente buscando nuevos reclutas, tanto en el mundo viviente como en el espiritual.
Desconocido.
Habían pasado un par de días desde que Victoria había empezado un sutil movimiento con Harry, había sido mínimo pero para ese momento lo que menos quería era apresurar las cosas con el chico, además de que su principal objetivo era entrar en la vida de Beatriz, ponerla a prueba y ver qué tan rápido perdía la cabeza con tan poco.
—Entonces niños, ¿alguna duda sobre cómo transformarse?—. Victoria parpadea con rapidez volviendo a concentrarse en lo que estaba haciendo en el momento; Nicolas, el líder del aquelarre, habla mirando a los 10 jóvenes que tenía delante de él, los más fuertes hasta ahora y los que habían demostrado tener el potencial para poder dejar su cuerpo humano por uno animal, algo que era difícil para los de su región, sobre todo porque sabía que era más común en países latinos.
—¿Qué pasa si no podemos?—. Carrington pregunta dejando de ver su celular para ver al líder de su aquelarre.
—Tienen tres clases para poder lograrlo contando esta, si no lo logran significa que no son tan poderosos como creían y que no podrán ver si son el o la próxima líder de este aquelarre.
—¿Y si lo logramos?—. Amelie Sawyer, una bruja de cabellos rubios pregunta dándole una rápida mirada a su novia quien tenía una expresión de molestía en su rostro por ser considerada débil.
—Seguirán pasando las pruebas, ahora, a trabajar.
James se gira para mirar a Victoria con una sonrisa pretenciosa y presumida, porque sabía el secreto de la chica y tambien sabia que sin importar lo mucho que todos los demás se esforzaran y que incluso logran algo, ninguno de ellos iba a ser el líder del aquelarre, nadie que no fuera Victoria.
—Quita esa sonrisa de tu rostro si no quieres tomar clases separadas de tu dulce Victoria—. Una voz ligeramente ronca hace que James gire su cabeza para ver a su amigo más reciente, quien da una calada más a su cigarrillo—. No me veas de esa forma, sabes que es verdad.
—Aunque me cueste aceptarlo, Dereck tiene razón—. Habla Victoria y sopla suavemente en dirección al chico que fuma apagando completamente el cigarrillo—. Y sabes que no se puede fumar en clases, deja de hacerlo—. Victoria le pide a Dereck de manera amable, el chico solo rueda los ojos dejando caer su cigarrillo ya apagado.
—Sobre todo con el señor Clutterbuck—. La suave voz angelical de Amelie hace que la miren—. Si me lo preguntan a mi, se me hace un poco extraño, ¿no se supone que Lucifer quiere el descontrol total?
—En realidad quiere almas a su servicio, sin importar cómo las consigamos, eso es lo que quiere—. Menciona Victoria alejándose de su grupo de amigos para cerrar sus ojos y no tomándole más que un par de segundos se transforma en una lechuza, el suave pelaje blanco con tonos cafés hace que se vea majestuosa, alza el vuelo para posarse en el hombro de James y todos los presentes la miran maravillados, pues poder transformarse en animal era algo que costaba mucho trabajo y ella lo logró a los segundos.
