¡Soy Homosexual! ; YoonMin.

20.

Final.
  
  

Viernes, 11 Abril 2014.

— Vaya, así que tú eres el que hizo a nuestro hijo cambiar de sexualidad. – Cuestionó la mujer mientras su esposo se mantenía a su lado con un rostro demasiado serio.

JiMin suspiro, viendo a su ahora novio inmune a su lado, sonrió. El día anterior YoonGi por fin le había pedido ser su novio, y sorprendentemente fue mucho mejor de lo que se hubiera imaginado.

YoonGi lo había llevado a afuera de las ciudades, a un hotel cinco estrellas durante un día total, en dónde recibió spa, masajes corporales, comidas deliciosas y claro, el pálido le dió acceso total para comprarle lo que fuera.

Y como si eso fuera poco, por la noche, habían ido a cenar al restaurante con temática clásica del hotel, en dónde ambos bailaron una balada que hizo a JiMin subir sus estándares hasta el cielo, siendo el pelinegro el único que ocupaba ese lugar de hombre perfecto. Después del baile, YoonGi se había subido al escenario, y tocándole una hermosa melodía en un piano de mesa que había en el lugar, le propuso ser su pareja.

Acepto, claro, y nuevamente fue sorprendido. Delante la multitud que había presenciado todo, le fue puesto un precioso brazalete de oro puro en su mano derecha, representante el noviazgo que se acababa de comenzar, JiMin estaba seguro que si alguien lo hubiera visto en la calle con ese brazalete le llevan hasta la mano.

Pero en fin, nunca, jamás de los jamases olvidaría ese día, porque a pesar de que YoonGi no fue romántico y fue coqueto y sucio de boca como siempre, las acciones hablaron por si solas, además, JiMin no quería cursilerías de por medio, hubiera muerto de la risa si hubiera visto al imponente hombre con tales actitudes, esas personalidades eran muy ridículas, incluso para el.

El amor, el gusto, la atracción, eran sentimientos que se podrían demostrar mejor con acciones y sinceridad, no con flores adornando todo, quizás su forma de ver la vista era muy simple y amargada, pero eso era lo que hacía que se comprendieran tan bien.

Sus formas de ser, actuar y pensar.

— Así es. – confirmo YoonGi sin rastro de duda. — Mucho gusto señores Park, soy Min YoonGi, tengo veintitrés años y soy oficialmente la pareja de su hijo.

Omitió el "cuiden de mi", JiMin sonrió por ello, su mayor era muy orgulloso para concluir la presentación formal.

— Soy Park BaekSeok la cabeza de esta familia. – hablo al fin su Padre. — Mi esposa Park Aecha, la dueña y señora de la familia Park.

JiMin sonrió ante la forma de presentar de su Padre, aunque Park BaekSeok era un autoritario de primera, la que siempre tenía la palabra era su madre, Park AeCha, una mujer imperturbable que era adorada por su esposo, y lo que ella dijera se tenía que cumplir al pie de la letra.

— Nuestra hija, Park Solar. – presento su madre a la niña que estaba a la par de ella con rostro neutro y aburrido. — La pequeña de nuestra familia... Por favor sentemonos, serviré la cena.

La pareja se sentó y entonces Park AeCha se marchó hacia la cocina quedando solo el Padre y hermana de JiMin con ellos.

— Dinos YoonGi, tenemos entendido que ya culminaste tu carrera universitaria, ¿Ya tienes un trabajo?

— Si. – la respuesta sorprendió a JiMin, el no recuerda haber escuchado eso de YoonGi. — Como sabe mi Padre es dueño de una agencia de seguridad, estoy trabajando como su encargado superior de una nueva sucursal que está construyendo en la ciudad de DaeGu, pero tengo un representante el cual hace acto de presencia por mi, trabajo desde casa porque actualmente estoy estudiando una maestría y especialización en mi área la cual concluí.

La respuesta pareció satisfacer en demasia a su Padre y JiMin se recordó mentalmente preguntarle más a su novio al respecto.

— Me alegra que un hombre cero conformista este a lado de mi hijo. — BaekSeok sonrió mínimamente. — Mi hijo solo merece lo mejor, espero y sepas apreciar lo que se ha sido entregado en tus manos.

— Lo se perfectamente, Señor Park. – no titubeó. — Al igual que usted estoy dispuesto a quitar del camino lo que sea que moleste mi chico... Sin importar quien sea.

El pelimorado suspiro por lo bajo, sintiendo que su padre y novio se llevarían excelente, pues el hombre a su lado era una versión mejorada de lo que era su Padre, un hombre el cual daba todo por lo que era suyo, incluso si eso incluyera planes oscuros.

La cena concluyó y ambos chicos se dispusieron a subir a la habitación del menor, siendo que el pálido se quedaría con el hasta el domingo por la tarde para pasar todo el fin de semana con el.

— Le agradaste a mis Padres.

— Soy yo, ¿Que esperabas? – YoonGi sonrió ladino una vez que estuvieran en la habitación. — La verdad supe que no les caería mal desde que estoy consiente que nuestros padres son amigos... Odio admitirlo pero el jodido carácter de mi padre lo tengo en todos los sentidos, mejorado pero lo tengo.

— Irónico, yo pensé que tú tenías la personalidad de mi padre mejorada.

— Lo observé, creeme, no es nada comparado a la actitud de mi Padre. – el pelinegro se dejó caer en su cama. — Tu padre es más sentimental lo puedo ver, mi padre es más... Egoísta, terco, mal intencionado, y cero compasivo, solo tiene sentimientos hacia su familia y seres queridos, si ve a alguien ajeno a sus cercanos en problemas el no es de los que te tenderá la mano, te dejará tirado sin importarle o sentir lastima en su interior.

— Y me estás diciendo que eres una versión "mejorada" de el. – Le pelimorado se tiró a su lado. — Según tu idioma es que eres cien veces peor.

— Mejor nene, mejor. – beso los labios rosados del chico. — Yo nunca sacrificaría lo que quiero por el bienestar de otros como los típicos hombres con complejo de héroes, yo tengo mi prioridad egoísta, yo estoy con lo que quiero y deseo, no me dejó influenciar por la lastima, y si tuviera que elegir entre que alguien ajeno a mi tuviera que morir o alejarme de ti, lo siento por esa persona, pero tú eres mío y de mi lado nunca te irás.

JiMin sintió la fuerza que impacto esas palabras con el, y en vez de sentir asco o alguna decepción el solo pudo sonreír complacido, demasiado satisfecho.

— Por primera vez me siento atraído al complejo de villano.

— Es por qué soy yo. – el pelinegro beso comenzó a besar y lamer su cuello. — ¿Por qué no te desvistes y te muestro lo que esté villano puede hacer por ti, nene?

— Con gusto.

 
  
  
  
  
  
  
  
  
 

Final.

Bueno nenxs, como sabrán solo falta el epílogo y obviamente los extras.

Mañana estaré actualizando Mimi Hyung, sin no han leído esa historia, ¡Vayan!, Se que les gustará.

Besos!