【Este libro contiene pequeños cortos sobre el ship Shadowpeach de Legó Monkie Kid, basadas en pequeñas ideas que se me ocurren o me puedan compartir, o incluso sacando ideas de películas o series.
En fin espero que lo disfruten, así como yo disfrut...
Macaque estaba sentado tranquilamente frente a la mesa de centro de la sala, disfrutando de una buena taza de té, mientras que los súbditos de su ruidoso y a veces insoportable rey, se dedicaban a acicalarlo o curioseaban a su alrededor con esa energía caótica, pero adorable que los caracterizaba, claro que también notaba que trataban de evitar los ruidos fuertes y eso lo agradecía profundamente
Un chillido exigente lo hizo rodear los ojos y girar un poco la cabeza para que una de las monitas pudiera acicalar bien esa parte de su cuello.
Era un momento bastante tranquilo, relajante incluso, y realmente necesitaba eso después de la semana infernal que había tenido.
Hasta que... Tap... Tap... Tap... Tap...
Un sonido insistente y rítmico rompió su tranquilidad.
Macaque alzó la vista con una ceja arqueada y vio a su compañero de pie frente a él, bajó un poco la mirada y se encontró con el verdadero culpable del ruido, la cola de Wukong.
Algo le molestaba.
—¿Qué suce...?— antes de poder terminar su pregunta, fue interrumpido.
—¿Los monos o yo?—
Macaque lo miró fijamente, tratando de procesar la pregunta.
—Perdona... ¿Qué?—
—¿Los monos o yo? ¿A quién prefieres?— repitió el pardo.
Su mirada viajó por un buen rato entre los monitos y Wukong.
En realidad no les veía mucha diferencia, ya sea con Wukong o con los monitos, recibía aseo gratis acompañado con comida, un par de bromas, compañía... Bien, ahora que lo pensaba la única diferencia era el ruido, estar con los monitos era más tranquilo que estar con su pareja
Wukong hacía mucho ruido
Demasiado ruido para sus pobres orejas.
—No deberías ni pensarlo— se quejó el mayor, cruzándose de brazos con un rostro que le decía que su indecisión le dolió.
—Sunshine...—
—No, no me hables— lo cortó de inmediato —vete con ellos, está claro a quién prefieres— le dio la espalda y se alejó rápidamente.
Macaque lo siguió con la mirada y bufó.
—¿Y yo soy la reina del drama?—
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¿Qué tal estuvo?
Si hubo algo que no hayan entendido, sean bienvenidos a preguntar, trataré de explicarles de alguna forma.
Como llevo mencionando hace rato si alguien desea compartir alguna idea para que lo intente, estaré encantada de plasmarlo, avisando que si no aparece no es por mala o porque no me gustó, sino porque posiblemente no me salió bien.
Las críticas constructivas son bienvenidas, claro que con respeto, no aceptaré ninguna que busque ofender, o rebajar mi trabajo.
En fin, que tengan un buen día, tarde o noche, no olviden dejar su estrellita y algún comentario si les gusto.