Anxiety; Max Mayfield

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ADVERTENCIA: 

Este capítulo puede contener escenas violentas, maltrato infantil, etc. Si no te gusta este tipo de contenidos, te recomiendos que te saltes este capítulo, no afectara en la historia.

Narrador Omnisciente

El ojiverde se había estatico al escuchar los gritos, veía detalladamente el lugar en donde estaba, habían dibujos en la cama, ropa tirada por aquí y por allá, posters de caricaturas, etc. Harrington se dió cuenta que era su habitación cuando vivía con sus padres, no se distrajó más y bajo lentamente a la sala de estar de donde provenían los gritos, era su padre golpeando a su hermano por haber intentado defender al pequeño Thomas, el pequeño estaba tirado a un lado, con miedo, y gritandolé a su padre que parará los golpes.

Su madre, estaba viendo todo a un costado, mientras tomaba una botella de Whisky, no pensaba parar el abuso, según ella era el que tenía que poner los limites, con o sin golpes.

El "Actual" Thomas veía todo desde la escalera, mientras sus ojos se cristalizaban poco a poco al ver la traumante escena, sentía como se formaba un nudo en su garganta, mientras poco a poco escuchaba como alguien llamaba su nombre.

— Papá basta dejalo!— Gritaba el niño llorando— Mamá haz algo!— 

La susodicha se encogió de hombros restandolé importancia.

— No es mi deber. Mejor deja de exagerar y traeme otra botella James—

Thomas sintió una ira apoderarse de su cuerpo, ahí recordó porque odiaba tanto a su madre. Por ser tan incredula y estupida.

Estaba mirando todo sin entender porque Vecna le mostraba esto, hasta que escuchó golpes en la puerta. Con un poco de miedo, fue a ver de que era ese golpe con un poco de miedo.

Thomas

Caminé hasta la puerta y ví como si fuera otro momento, ¿Acaso Vecna estaba jugando con mi mente cambiando de un momento a otro momento traumatico? Está vez ví como yo lloraba y lloraba rogandolé a mis padres que se quedarán y no me dejarán solo a mi y a Steve. El estaba paralizado, no sabía que hacer, que decir, si moverse o no moverse, si hablar o no hablar, estaba quieto del miedo, y como no, si derrepente ellos hicieron sus maletas y dijieron que se iban lejos de nosotros.

— Por favor, mamá papá quedense!— Rogaba yo llorando, que haría yo sin mis padres? Me preguntaba yo en ese momento—

Si, los odiaba, pero yo en ese momento me odiaba, me sentía tan cobarde, me odiaba por quererlos al menos un poco.

— NO QUIERO VOLVER A VERTE NIÑO MOCOSO! SUELTA MI PIE TARADO!— Decía mientras abría la puerta—

Rogar no servió de nada, no iba de servir de nada, pero yo pensaba que si.

— Ven Thomas... No sirve rogar en está vida mugrienta...— Dijo Steve para consolarme—

Sentí como otra vez llamaban mi nombre, «Es solo un juego mental» Me dije a mi mismo.

«Jaja... Creés que esto es un juego mental, Thomas?»  -Escuché una voz gruesa y aspera

Mi piel se erizó y sentí una punzada en el pecho.