⋆𝘊𝘢𝘱í𝘵𝘶𝘭𝘰 5

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Waffles, tengo un amigo 。。・

Matemáticas. Si, una de las materias más aburridas, especialmente si la tienes con el profesor Bellman. En primer lugar, su apellido es muy estúpido. ¿Hombre campana? En segundo lugar, su voz es una de las cosas más irritantes que existe. En tercer lugar, No. Sabe. Enseñar. Se cree que sabe toda la materia, y tal vez lo hace, pero podría esforzarse más en hacérnosla entender.

Me encuentro en frente de la puerta de mi aula, pero no puedo entrar. He llegado media hora tarde, y sentir las miradas de todos cuando entro no es algo que me agrade. De todas formas tengo bastantes compañeros, y que yo no vaya a la clase nadie lo notará.

Giro sobre mis talones y me quedo mirando el amplio patio de mi instituto. Está siempre verde. Ahora mismo hay un hombre cortándolo con la máquina corta pasto. Todo el instituto es casi perfecto, y se mantiene muy limpio. No tengo idea del porqué mis padres se molestan en pagarme algo así cuando puedo ir a una escuela pública.

La respuesta es fácil Ellie.

Si, ya lo he pensado. Mi teoría es que quieren que estudie algo que produzca bastante dinero para mantenerlos y pagarles sus caprichos, cosa que definitivamente no haré.

Empiezo a jugar con el arcial de mi mochila que está descansando sobre mi hombro derecho. No sé qué hacer. Podría ir a pintar a la sala de arte, pero ahora hay cases allí.

Iré a un árbol grande que da sombra. El verano está terminando, pero aún hace calor.

Tomo los acrílicos y un pequeño bastidor de mí casillero y me dirijo al árbol. Al llegar, me apoyo en el tronco y me dejo caer al pasto.

El ambiente es muy agradable. Hay una suave brisa que refresca mi rostro, y no se escucha nada más que los pájaros y la cortadora de pasto a lo lejos.

Doy una gran bocanada de aire y abro el tubo de pintura verde. Le echo un poco al bastidor y con un pincel lo cubro de ese color.

Ahora solo falta esperar a que seque.

Quiero hacer algo nuevo. Nunca me he atrevido a hacer algo más que ojos, y quiero intentarlo. El paisaje desde mi vista es bonito, así que puedo por lo menos intentar pintar un árbol.

Una vez que la pintura está seca, coloco en la parte superior un poco de celeste, y blanco un poco más abajo. Pinto un poco de cielo y lo voy difuminando con el blanco para que se haga más claro. Una vez que termino el cielo, le hago un limite con el pasto.

Diablos, creo que el cielo se hacía primero y luego el césped.

Si, al parecer si. Ahora se ve horrible.

-No sirvo para esto -Le digo al aire frustrada volviendo a ponerle verde para hacer un buen límite entre el cielo y el pasto. Muevo el pincel hacia la izquierda y hacia la derecha rápidamente porque quiero terminar de una vez con el fondo.

No debí haber intentado hacer otra cosa.

Cuando termino, pongo el bastidor en el suelo y dejo caer mi espalda contra el tronco del árbol. Miro por unos segundos la pintura, e intento apagar mis ganas de romperla. Cuando algo no me sale bien, me frustro bastante.

Unidos por unas tejas | Booabyjvibe | (En proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora