Gracias A Ti -NaruNejifem-

🌼Capítulo 14: Negación.

🌼Capítulo 14: Negación.

Hombres retorsiendose del dolor caían al suelo, después de varios golpes recibidos. Dos oji-perlas se encontraba en el centro de su barrio, peliando con todos los ninjas de su clan, no querían dañarlos pero ellos tenían otras intenciones con ella.

Espalda con espalda, protegiéndose entre una a la otra. Había cometido una gran falta. Atacar al líder del clan y no solo su líder era su pariente más cercano a ellas, era una muestra de traición y merecían ser castigadas por tan falta. Pero, no podían quedarse tenía que salir lo más rápido de ese recínto hasta que las atraparan, sabían que solo las estaba cansado para tomarles ventaja cuando se agotarán, ninguno peliada con ánimos y eso los hacía caer de manera rápida.

Naji hacer una Jonnin y una prodigio tenía más resistencia qué cualquier otro en su clan, pero a Hinata ya le estaba tomado factura el sobre esfuerzo de mantenerse en pie para protegerlas ambas, peliar con varios poseedores del Byakugan era un gran desafío. Le fue difícil pelear con Naji es los exámenes Chunnin imagínese peliar con más de 10 personas a la vez y que vengan de varias direcciones, no tenía que bajar la guardia, no podía no sólo su futuro estaba en riesgo sino también sus vidas.

Naji giraba, corría, golpeaba y saltaba. No tenía tiempo ni para respirar bien y gracias a eso su estilo de pelea le  estaba cobrando un precio, su respiración era muy pesada, su pecho dolía haciéndole saber que su pulmones estaba llegando a su límite tenian qué salir Ya, antes que su tío despierte él era el único que la podía someterla al jutsu y si lo lograba Hinata se rendiría y quien sabe lo que pasaría después.

Tomo la mano del joven en frente, con su mano libre bloqueo varios puntos de chakcra y lo estrelló contra la chica a sus espaldas. Salto, sus piernas se abrieron en aire realizado un Lleted perfecto así pateando a los que venía a sus costados y con el puño al qué venía de frente. Busco con la mirada a Hinata, esta estaba a escaso metros de ella, su respiración también era frenética. Tenía que salir de aquí lo más rápido posible, ya había perdido la cuenta de cuantas veses esas palabras recorrieron su mente.

Hinata de un solo golpe los ponía a dormir, no era lo suficientemente fuerte, pero fue bendecida con una agilidad extraordinaria, para poder evitar golpear a su gente. Aunque su vida dependiera de ello, no quería lastimalos los golpeaba cuando era demasiado tarde para esquivarlos y trataba de hacerlo lo menos fuerte posible para que no salieran tan lastimados. Sabía que iba a vivir con una carga en su consciencia al lástima a los que consideraba su familia, eran parientes lejanos, pero no podía dejar que la atraparan a ella o a su prima, podía vivir con eso y superalo con el tiempo, Pero. Si algo le llegará a pasar a Naji por su generosidad, nunca se lo perdonaría con esa carga nunca sería capaz de vivir.

Sabía que si detenía esto ahora, su padre la perdonaría y no la castigaria tan fuertemente, pero no quiera detenerse tal vez a ella no le den un castigo fuerte por ser la heredera del Clan, pero a Naji. A ella si sería capaz de hacerlo lo peor y su padre no sentirán ni una pizca de compacion a lo que fuera qué le harían... Y tampoco quería saberlo, por eso peliaba aunque le doliera hacerlo, pero más le dolería perder a su prima que esas personas que solo les tenía aprecio, a Naji la amaba como la hermana pequeña que nunca tuvo porqué Hanabi nunca lo fue, siempre la miraba con odio nunca supo el porque aquel odio hacia ella, pero tampoco le interesaba, ya no más ahora tenía a Naji y la protegería aunque la vida le costará.

De repente sintió como algo se presiona contra su cuello. Una soga, trata de quitar al individuo qué ceoso a colocarla, pero se congeló a oir eso voz tan conocida para ella.

— Deja de peliar Naji! — Grito con rabia.

La nombrada dejo su puño en el aire al mirar a donde su prima se encontraba, se congeló y trago secó, lentamente levanto sus manos en señal que no pondría resistencia, al hacerlo rápidamente sus manos pasaron a sus espalda para amarrala con alagres ninjas. Hinata negaba trataba se alejaste de la que por años creyó que era su dulce y tierna hermana menor.