Al día siguiente de su anterior visita, Lord Orochi regresó al misterioso búnker subterráneo. El guardián, que había estado vigilante y protector del lugar, lo recibió una vez más. Esta vez, el guardián tenía una solicitud especial para Lord Orochi.
Guardián: Lord Orochi, le agradecería si pudiera proporcionarme un fragmento de su carne.
Lord Orochi, intrigado por esta solicitud inusual, accedió sin dudarlo. Extendió su brazo y permitió que el guardián extrajera un pequeño fragmento de su carne. La transacción se realizó sin dolor ni inconvenientes aparentes.
Después de recibir el fragmento de carne, el guardián activó una máquina que comenzó a proporcionar información. Mientras Lord Orochi observaba el proceso, se dio cuenta de que estaba obteniendo acceso a un mapa detallado del búnker y a cierta información sobre su contenido.
Pasaron al menos una hora examinando el mapa y asimilando la información. Lord Orochi quedó perplejo al descubrir un grupo de titanes robots inactivos en el búnker. Observó su diseño y llegó a la conclusión de que eran titanes de combate altamente avanzados.
Lord Orochi(pensando asi mismo): Estos robots titanes... parecen ser máquinas de combate. Su apariencia es impresionante.
Al concluir su investigación, el guardián se dirigió a Orochi con una serie de preguntas.
Guardián: ¿tu ADN tiene la capacidad de resistir altas temperaturas y daños severos?
Lord Orochi: Sí, mi cuerpo puede soportar condiciones extremas, incluso altas temperaturas y no sufrir daños considerables.
Guardián: ¿Sería posible contener lava en su interior?
Lord Orochi: Sí, podría contener lava en su interior si fuera necesario.
Guardián: ¿Sería tan amable de extraer lava de las profundidades más remotas de este búnker?
Lord Orochi: Por supuesto, si es necesario, puedo hacerlo. Pero ¿para qué necesitas lava?
El guardián no proporcionó una respuesta inmediata, lo que dejó a Lord Orochi con más preguntas que respuestas. Sin embargo, quedaba claro que su relación con el guardián y el búnker subterráneo estaba lejos de haberse resuelto, y que se avecinaban más misterios y desafíos en su camino mientras exploraba este enigma tecnológico bajo tierra.
Lord Orochi procedió a cumplir la inusual petición del guardián de extraer lava de las profundidades más remotas del búnker. Utilizando su capacidad única como titán, canalizó el magma ardiente en un contenedor especial proporcionado por el guardián. La tarea fue llevada a cabo sin problemas, y pronto el contenedor estaba lleno de lava ardiente y brillante.
Una vez que la extracción de lava estuvo completa, Lord Orochi se preparó para salir del búnker con la intención de cazar y alimentarse. Sin embargo, antes de que pudiera dar un solo paso, el guardián intervino.
Guardián(con cortesía): Lord Orochi, antes de partir, permítame ofrecerle una generosa cantidad de alimentos ricos en nutrientes. Estos alimentos son artificiales pero extremadamente nutritivos.
Lord Orochi, que sentía el hambre en ese momento, aceptó la oferta del guardián. Se le entregó una abundante cantidad de alimentos que parecían estar diseñados específicamente para las necesidades de su titán. Lord Orochi comenzó a consumir la comida, y pronto sintió una sensación de saciedad y satisfacción.
Sin embargo, a medida que continuaba comiendo, una sensación de somnolencia lo invadió gradualmente. Pronto, luchó por mantenerse despierto y finalmente se rindió al cansancio, cayendo en un sueño profundo.
El guardián, observando la reacción de Lord Orochi, se sintió apenado y se disculpó.
Guardián: Lamento no haber advertido los efectos secundarios de esta comida artificial. No sabía que causaría somnolencia. La próxima vez, me aseguraré de que no ocurra de nuevo.
A pesar de su agotamiento, Lord Orochi aceptó las disculpas del guardián con una amabilidad serena. Se recostó con una mirada pensativa cerca de los titanes robóticos inactivos y, lentamente, cerró los ojos. La relación entre Lord Orochi, el misterioso guardián y el enigmático búnker subterráneo seguía profundizándose con cada interacción. El guardián, gradualmente, ganaba confianza en su visitante inusual. Mientras Lord Orochi descansaba, una corriente de misterio y anticipación llenaba el aire en la penumbra del búnker. El guardián, en sus momentos de reposo, se encontraba inmerso en un torbellino de preguntas sobre lo que podría depararles en ese intrigante mundo bajo tierra. El pasado y el futuro se entrelazaban, formando una trama aún más enigmática en las profundidades de aquel lugar secreto.
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yo reencarno en rey orochi y caia en ataque de los titanes
Fiksi Penggemardonde estoy? este no es mi mundo que conozco. El nuevo rey orochi buscara una forma de volver a la normalidad o quizás?, se quedara para siempre como un kaijin.