Love Me

Capítulo 24

Lola

Nos quedamos dormidos. En mi defensa tuve que dar dos funciones y llegué muy cansada a casa, y Arturo se quedó despierto conmigo ayudándome a empacar; de no ser porque Lau llegó a casa para recibir las llaves, porque ella cuidaría a todos nuestros perritos, nos hubiésemos perdido el vuelo.

Llegamos entre risas y nervios al aeropuerto, y quizá fue las pláticas entretenidas de Arturo o la forma en que tomaba mi mano a escondidas lo que hizo que los nervios habituales de volar se esfumaran por completo. Nos volvimos ajenos al resto de personas que nos acompañaba, conversando sin parar de cualquier cosa sin importancia, haciendo que el vuelo fuera un suspiro en el tiempo.

Teníamos muchas personas a nuestro alrededor moviéndose todo el tiempo y dándonos indicaciones de lo que debíamos decir, y el público en general que ya estaba esperando a las afueras del hotel junto con periodistas dispuestos a ponernos la cámara en el rostro; incluso así, cada vez que buscaba la mirada de Arturo, de lejos porque debíamos cumplir cada uno con nuestras responsabilidades de dar entrevistas, él estaba contemplándome, haciéndome sentir como si fuese la única persona en su universo.

Fui tan feliz de al menos compartir la mesa durante la comida, sentirlo junto a mí y escuchar sus tontas bromas. Me hizo desear que dejáramos de esconder nuestra relación de una vez por todas, fantaseé con la idea de ser dos personas normales que compartían la mesa durante el almuerzo en un hotel donde decidimos pasar vacaciones; dos personas que nadie observa, ni critica y que pueden hacer lo que quieran sin ser juzgados.

—Tienen quince minutos para ir al baño, refrescarse y luego seguir con las entrevistas. No se olviden de revisar el itinerario para mañana —nos dijo alguien de producción.

No pudimos escaparnos juntos esos minutos, las entrevistas y obligaciones continuaron abrumándonos y teníamos personas de seguridad que la producción había repartido por el hotel. Al menos me resultó grato que Pancho me acompañara un tiempo, se encargó de llevarme frutas y agua, y espantar a personas incómodas que no parecían tan felices de verme.

—Ya quiero que se acabe esto y volver a la calma.

—¿No piensas regresar la próxima temporada? —preguntó él.

Mi expresión lo dijo todo y él pareció entender, me contó que Ilse andaba diciendo que no iba a renovar contrato, aunque la verdad era que no le habían ofrecido regresar, y que estaba molesta porque al parecer no le cumplieron muchas de las exigencias que había hecho.

—Es que no entiende que no tiene talento —dijo Pancho—, al menos Mimí tiene personalidad.

—Nunca debieron invitarla. Es una vergüenza —sacudí la cabeza recordando lo mal que la había pasado trabajando con ella.

—Se supone que querían un disco y un montón de conciertos. No les van a dar nada. Y está molesta porque sabe que a ti te están ofreciendo novelas.

—¿Y yo qué culpa tengo? Que se quede con las novelas y con todo. Yo no quiero nada.

—Ya que estamos hablando de trabajo, podrías darme el número de tu manager, es que tengo unos eventos y me gustaría contratarte.

—¿A mí?

—Por supuesto. Todo el mundo quiere contratarte.

—No lo creo —dije riéndome.

—Habló en serio, y soy muy serio como productor. Así que quiero hacerlo formal, como la estrella que eres.

—Eres tan lindo.

—Tú lo eres. Tengo esta conexión contigo que me hace querer ser tu mejor amigo. Así que al menos permíteme el honor de reunirme con tu manager, quizá y puedas estar interesada.