𝗛 | 𝗽𝗲𝘁𝗲𝗿 𝗽𝗮𝗿𝗸𝗲𝗿.
──╯⋄ꕥ. 𝘼𝙖𝙙𝙮𝙖 𝙍𝙤𝙙𝙧𝙞𝙜𝙪𝙚𝙯 quería crecer como una adolescente normal y la pubertad golpeó su puerta; no solo trayendo sus poderes mutantes desarrollados, sino terribles tragedias con ella. Todo en su vi...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
VERÓNICA RODRÍGUEZ no había blipeado.
Por el contrario, había permanecido en la tierra reconstruyendo su vida a lo largo de esos cinco años. Esa primera noticia, había impactado a Aadya hasta el punto de hacerla llorar, lágrimas comenzaron a desbordarse de sus ojos a causa de la felicidad o angustia que esas palabras lograron en ella, no podía entender sus emociones, sucumbían muy fuerte en su interior para poder reconocerlas. Antes de tener la oportunidad de preguntarle algo a María Hill, la ex agente de S.H.I.E.L.D siguió hablando, sus labios se movían y cada palabra había sido escuchada atentamente por la mutante adolescente, aún así, su cerebro se desconectó de la realidad en el preciso momento que las palabras tuvieron sentido y orden en su cabeza.
Repitió las palabras en su cerebro, intentando leer entre líneas. Recreando escenarios que seguían al pie de la letra de la historia contada, todo eso para lograr entender la simplicidad de las palabras de Hill.
Su tía Verónica se había casado, había formado una familia. Se enamoró y había tomado la decisión de casarse con un hombre que conoció en esos cincos años de su ausencia. Tenía un hijo y vivían en una normal y hermosa casa en New Jersey. Su tía había construido una vida sin ella.
María Hill siguió pronunciando palabras que no llegaron a sus oídos. En cambio, su mente quedó sumida en silencio, con solo los propios sonidos de sus pensamientos. No estaba triste por ésto. Era estúpido y egoísta estarlo. En cualquier situación debía estar feliz por ella ¿no?Aadya podría asegurar que lo estaba. Porque una familia propia era justo lo que necesitaba su tía.
Verónica había sacrificado su propia vida al adoptarla durante todos estos años. Tampoco es como si Aadya no hubiera anticipado que este día llegaría, el día donde su tía conocería a un hombre con el cuál valiera la pena formalizar una relación y ¿Qué mejor oportunidad que durante esos cinco años? Aadya no podía (ni quería) pensar de manera egoísta, su tía necesitaba la normalidad y la paz que una familia propia debía proporcionar, sobre todo con los acontecimientos del Blip y de perder a su sobrina sin ningún aviso en un país extranjero.
Estaba feliz por ella. Sabía que lo era, bajo el volcán de emociones que sentía en su interior. La presión que se formaba en su pecho con cada pensamiento que aparecía en su cabeza dejaba al aire sus propios temores e inquietudes. Sin embargo, no impidió que nada de esto se sintiera incorrecto. Nada se sentía... Normal.
¿Que era lo normal, Aadya? Se dijo así misma con reproche.
Su vida cómo la conocía antes, había desaparecido en lo que Aadya había vivido como segundos. Segundos que enrealidad habían sido años. Cinco años alejada de las personas que más amaba en el mundo.
