¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Cualquiera que pasara por su lado creeria que la pareja mas famosa del castillo volvio al ver aquella escena. James se encontraba acostado en la manta usando sus brazos como su propia almohada, en su regazo se encontraba la cabeza de Leah quien jugaba con el cabello del niño ahora dormido en sus piernas.
— James.— llamo Leah mirando al chico.
— dime.
— ¿volverias a mi?— pregunto Leah sin filtro, habia preguntas que jamas que iban de su mente.
— ¿a ti?— Dijo confundido, ella asintió.
— ¿volverías a tener una relacion conmigo?
— ¿tu tendrías una conmigo?—
— ¿por segunda vez dices?
— Leah, no vivas del pasado.
— si, tendría algo contigo.— Una sonisa nacio en la cara de James.
— tambien volveria estar contigo, jamas dudes que no quiero eso.
El silencio se apodero del lugar, pero no uno incomodo, sino uno que daba paz. Paz era lo que sentian, lo sentian los tres; Era como si quisieran quedarse alli por dias y dias sin descanzo.
James sintio como su amada volvia a el y como el a ella, como si su alma volviera a su cuerpo.
— Te amo Leah, aunque vos ahora de mí no.— susurro James de una manera . .casi audible convencido de que Leah no lo escucho, estaba equivocado.
(...)
James volvio a su cuarto con una sonrisa en su cara, su corazon palpitaba como olvido que podia hacerlo y su felicidad era notable a metros.
— ¿cómo te fue Cornamenta?— Remus doblaba su ropa ya limpia por los elfos.
— ¿qué tal el niño?— dijo Sirius.
— Bien, me fue bien. Jugamos en el lago y hablamos de nosotros.Luka no fue un problema.— Remus sonrio ante la felicidad de su amigo.
REMUS POV'S
Luego de charlar con James sobre su hermosa tarde decidimos ir al gran comedor a cenar, y ahi nos encontrábamos.
— Remus, luego de la cena me gustaría que me ayudes en algo.— Lea me miro y solo Asenti.
— claro, con gusto.
— ¿donde iran?— Sirius se metio a nuestra conversacion.
— Secreto.— Leah le respondió al instante y escuche una risa suave de Peter.
— Remus no tiene secretos con nosotros, enterate.— Sirius parecia sacar su niño interior cada vez que estaba Leah a su alrededor.
— Oh, no sabes lo mucho que me interesa. El no lo dia, ¿no?— Me miro y luego a Sirius,
— Claro que no.
— ¿lo vez?.
— ¡el lo dira!.— Sirius se desespero al perder en la conversacion.
— Tranquilo Black, te saldrán canas.— Leah le burlo de el.
— te odio Ross.— se cruzo de brazos y miro a James quien tenia su mirada hacia el extremo contrario a nosotros en la mesa. Todos seguimos su mirada y nos encontramos con Evans riendo con Marlene. Por costumbre mire a Leah y luego recorde que no se sentiria celosa por su ignorancia hacia su amor por James si embargo, me sorprendi al verla mordiendo su uña con su cabeza de lado mirando a James y luego a Lily.— Potter, no puedes mirar a mi competencia.— Sirius puso su mano en el hombro de James y el lo miro desorientado.
— Oh, si lo lamento.— Nos miro a todos pero su mirada quedo en aquella Leah celosa, James conocia cada gesto de Leah en ese modo.
— Leah, ¿estas bien?— Peter la miro confundido al ver a la chica con el ceño fruncido en direccion a James.— te quedaras sin uñas.— La chica lo miro y se encogió en su lugar,
— Estoy perfecta Peter, ¿ me ves mal?.— Sin darse cuenta fue algo brusca en sus ultimas palabras, Peter no lo sintio personal al darse cuenta de sus celos.
— Las mujeres son raras.— Sirius intento susurrarle a James.
— ¿rara? ¿Yo rara?— Leah se acerco a Sirius quien negaba repetidamente.— ¡Yo¡
— No, no, las otras mujeres.
— Remus, vamos.— Sin esperarme comenzo a caminar a la salida.
— te matara.— me dijo Sirius.
— no entiendo por que se puso asi.— dijo James.
— ¿por qué mirabas a Evans?— le pregunto Peter a James
— No lo se, la vi y simplemente segui haciéndolo, solo atraccion fisica, ¿esta mal?
—No. No lo esta, el que ames a Leah no saca que tengas atraccion fisica por otras chicas.
— Lo se pero fue como si fantaseara un futuro con Evans, solo se veia linda y la mire, nada mas.— James explico.
— No debes explicarnos James.— Seguí a Leah sin esperar respuesta.— ¡Leah!.— dije llegando a ella
— Vamos, necesito que me ayudes en Historia de la magia.— dijo una vez que llegamos a la biblioteca buscando en los estantes libros sobre el tema.
— Bien, ¿qué tema?
— La guerra de los gigantes.— Respondio con una notable voz enojada. Tomamos asiento y sin poder contenerme pregunte.
— Leah ¿qué te sucedio?...— ella miro hacia abajo jugando con sus manos.
— No lo se, fue como si quisiera que el solo me mire a mi, no es encontra de Lily, ella me cae bien. No se bien que fue pero senti como un fuego que solo..— se interrumpió.— Remus cuenta me de nosotros, de mi amor con James.— dijo casi en suplica.
— Sabes, hasta el dia de hoy Jamas habia visto un amor que se compare a de ustedes, jamas senti una energia como la que sentia cuando estaban juntos, jamas volvi a ver ese brillo en sus ojos al mirarse, eh visto amores hermosos, como el de los padres de James o el de Alice y Fank, pero jamas uno que se iguale al de ustedes. — me acomode en mi silla, Leah solo me miraba atenta a mis palabras.— No solo se conformaron con enamorarse una vez, decian que debian enamorarse dia a dia y por eso hacian lo que hacian.
— ¿Qué cosa?
— Mira, una vez James dicidio llevarte a escalar, en cada uno de sus partidos su primer punto tenia una dedicatoria y era para ti, el decia que debia ser el primer punto por que tu eras lo primero en su vida. Siempre te llevaba despues de jugar a en paseo a las afueras del castillo, donde el dijo que se volvieron novios, para recordarse a si mismo el lugar donde " se sintio completo" por primera vez.
— ¿solo el hacia eso? ¿era mala novia?
— Claro que no. Podias pasar dias organizando picnic, todos los veranos buscabas un lugar del que James no sepa su existencia para llevarlo contigo, cada domingo hacias regalos para el llenando nuestra habitacion, aunque Sirius se robaba el 25% de ellos.
— mi familia no es adinerada , ¿cómo podia regalarle cosas todos los domingos?
— no eran regalos de valor economicos, tu sabes coser, dibujar y cocinar. Siempre eran pulseras, corazones tejidos a mano, cuadros y claro que tambien cosas con valor.
Leah deseo con todas sus fuerzas volver a recordar.
— Leah, tu lo amabas, lo amabas como jamas amaste a alguien y era reciproco.
