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James Potter se sentía el hombre más feliz que alguna vez tocó la tierra; ahora mismo corría por los pasillos del castillo con Leah siendo arrastrada por el. Sentía las miradas pero no le importaba en absoluto, sentía tanta felicidad que creía que podía explotar.

—Amor, me caeré.— Leah sonreía riendo de la alegría.

James paro y tomando su cara deposito un beso largo.

—Ademas, mis piernas duelen.— Leah con su mano suelta tocó su pierna derecha.

—Lo lamento, es que estoy tan feliz.—

—Yo también amor mío.—  las mejillas de James enrojecieron sintiendo devuelta ese niño de trece años que moría por una mirada de Leah.

James se dio un paso hacia ella y en ese momento escucho una voz.

—Por fin volvieron.— Sirius Black todo los ojos y su vista fue a sus manos entrelazadas para luego mirar a Leah solamente. un pequeño e insignificante vacio lo arrebata.

—Oh, ¿Tardamos mucho? — Pregunto James con inocencia.

Tanto James como Leah podian sentir como un extasis eternos los atravesaba cada vez que se encontraban juntos, como cada escena de vivian juntos los embelesaba sin fin y su amor adolescente crecia con cada accion del otro. 

—Solo un poco.— Remis lupin dijo mientras buscaba algo o alguien con la mirada.

— Leah, debes ayudarme, lo prometiste.— Dijo Sirius reclamando.

— Relajate Canuto.— Dijo James extraño.

— No me negué, te ayudaré.— Leah frunció las cejas.— ¿Debe ser ahora?—

—Si, tengo todo preparado.— Dijo sonrió

—Bien, solo déjame contarles algo antes.

 Leah sonrió y miro a lo chicos.

—!Recordó! !Me recordó¡— Dijo James sacándole la palabra de la boca, los presentes lo miraron algunos extraño y otro mal. —Lo lamento amor, perdón. — se disculpa con la chica, quien alzó los hombros.

—No importa.— Le resto importancia. Lo próximo que sintió fue unos brazos envolviendo su cuerpo.

— Felicitaciones Leah.— Fijo Remus con los ojos cerrados en el abrazo.

—Me alegro mucho.— sonrió genuinamente Sirius.

Leah se separó del abrazo del chico.

—Muchas gracias Chicos.— Dijo Leah.

—Vamos.— Sirius tomo a mano de la chica y la arrastro con el en un intento hasta inconciente de atencion.

—Si tu dices.— Dijo Leah con claro sarcasmo.

AMNESIA ; JAMES POTTER.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora