The Purge: Sobrevive a la Noche

Capítulo 8: La Subasta

El camión empezaba a moverse, claro que ya iban de camino a lo que ellos pensaban que era una subasta, pero, ¿en dónde? Ninguno de ellos tenía la mínima idea de donde se dirigían.

Gina abrazada a sus dos hijos, el abuelo estaba al lado de ellos en un fuerte silencio, Oliver y sus 2 amigos no hablaban, estaban serios, Sam sólo miraba al resto y Tom estaba con la cabeza abajo, mirando el suelo, era un silencio muy potente, sólo se escuchaban las ruedas del camión y los sonidos de éste al tambalearse.

Entonces, Oliver decidió romper el silencio.

-Hola, soy Oliver-dijo levantando su mano a Gina, en ese movimiento repentino, los soldados movieron sus armas apuntando a él, Oliver sólo los miró-, wow, tranquilos, sólo quiero presentarme.

Gina alzó su cabeza lentamente y lo miró.

-Soy Gina-dijo estrechando su mano con la de Oliver-, ellos son Charles y Lina.

-Ellos son mis 2 amigos, Carl y Marco-dijo Oliver señalando a sus amigos.

-Un gusto conocerlos.

Hubo otro silencio incómodo, luego el abuelo lo rompió.

-No es momento de presentarnos, nos llevan a una subasta, nos venderán como objetos.

Entonces Tom respondió:

-Él tiene razón, es mejor estar así, porque si nos empieza a agradar un desconocido y lo vemos morir será el doble de peor.

-Ya habías empezado a agradarme-dijo Gina con cierto enojo.

Tom sólo bajó la cabeza.

Minutos después, el camión se detuvo, entonces la puerta de éste se abrió, J.K estaba al frente de ellos y le dijo a los soldados que los bajaran.

Cuando todos estaban afuera, miraron a su alrededor.

4:00 am, 3 horas para la conclusión de La Purga anual.

El lugar era amplio, era un parque al aire libre con una fuente en el centro, era un condominio rico, a juzgar por aquellas casas y esos extravagantes árboles y aquellas decoraciones, estaban en el barrio rico de la ciudad.

-Caminen-dijo J.K.

Entonces los soldados comenzaron a llevar en fila a sus rehenes.

Entraron en un enorme portón, el cual, a través de él había un extravagante jardín, que era propiedad de una enorme mansión, todos ellos se quedaron pasmados de semejante estructura, entonces entraron por la puerta principal color rojo, y a través de ella había un enorme salón, con mesas, camareros, vinos y licores, bocadillos, un pequeño grupo que tocaba música clásica, luces y lámparas extravagantes, un enorme escenario y claro, personas que juzgar por su ropa, eran millonarios de clase alta, estaban aplaudiendo cuando entraron, caminaban sobre una alfombra roja que conducía al escenario, entonces siguieron y fue ahí donde llegaron, al escenario.

La música paró y los aplausos cesaron.

Entonces, una mujer de unos 55 años, rubia, con unas canas, con un vestido azul puesto y joyería, subió al escenario, tenía un micrófono en la mano, parecía ser la anfitriona.

-Buenas noches, lamentamos la espera que les hemos dado-dijo la anfitriona-, pero la caza de esta noche a sido un poco complicada, pero les compensaremos, porque hoy tenemos un lote extraordinario, como pueden ver, una mujer y sus 2 hijos, más su padre, el cual, trabajó con nosotros, tenemos también un guarda de una secundaria, a 3 adolescentes y al mismísimo Tom Fallen, el hombre que está contra La Purga. ¿No creen que es un lote extraordinario?