Felix fue atado a un compromiso con un príncipe de Corea, el australiano fue el tratado de paz, pero entre más Felix se acercaba a su esposo más nesesitaba saber que era amor que existía en ambos corazones.
y el corazon de el rey Hyunjin avía caído...
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Seungmin al pasar unos minutos ya no podía evitar el que sus piernas temblaran así que con ayuda de uno de los guardias betas se sentó, Minho se puso un escalón abajo y se hincó en frente de Seungmin.
Minho: ¿Como sucedió eso?
Minho señaló algunos rasguños en el cuello de el omega el cual se tapó más con la capa, al sentir el tacto del alfa en su mejilla se aturdido, pero rápido recupero la compostura quitando su mano de el.
Seungmin: No es de importancia, ¿puedes ver si el rey consorte esta bien?, por favor.
Seungmin desvío su vista a uno de los guardias el cual asintió pero antes de seguir vio a los guardias volver sin Felix.
— Los reyes, necestan privacidad.
Minho: Bien, todos vuelvan a sus puestos no hay nada más que ver aquí y todos aprendan el auto control.
Minho hablo a los guardias los cuales agacharon la cabeza y volvieron a sus posiciones.
Minho: Vamos, Arriba.
Seungmin vio la mano extendida, no la tomó y como pudo se levantó.
Seungmin: No me moveré, esperare a su majestad Felix aquí.
Minho: No seas ridículo, apenas te mantienes de pie y dudo su majestad quiera que te enfermers y creo que más importante alguien atienda esos ataques de alfa.
Seungmin se quedó callado, sabía que Felix no quería que lo dejara jamás solo, y si lo esperaba en el frío y con sus heridas abiertas si podría enfermar, miró a Minho el cual bufo no iba a discutir con él omega así que lo cargo como costal de papas, para llevarlo a su habitación.
