𝙘𝙖𝙥í𝙩𝙪𝙡𝙤 siete

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ㅡ Dijiste que era sólo una visita rápida... ㅡ Minho miraba cómo el rubio arrastraba el cuerpo de su mejor amigo.

ㅡ No planeaba que tú le confesaras todo e hicieras esto más difícil. ㅡ Tendió el cuerpo de Changbin junto a una maleta de gran tamaño perteneciente al mismo.

ㅡ No le hagas daño, Hyunjin, te lo suplico. ㅡ Lee temblaba, nervioso.

Hwang suspiró, molesto, casi como un bufido.

ㅡ No te pienso asegurar nada, Minho.

ㅡ De verdad, no le hagas daño, no podría perdonarte, ni perdonarme a mí. Él no eligió meterse en esto.

ㅡ ¡Lo hubieses pensado antes de abrir la boca! ㅡ Levantó el tono de voz el menor, acercándose prepotente al pelinegro. Luego retrocedió al ver el temor en el rostro del mayor, respiró profundo antes de volver a hablar, buscando calmarse. ㅡ Lo siento... pero Changbin es un problema más grande de lo que parece. Es detective, Minho, si habla estoy jodido, y tú igual.

ㅡ Y él también, por encubrirme, ¿de verdad crees que va a decir algo?

ㅡ Las cosas no funcionan así, la ley lo va a respaldar todo lo que pueda, lo pondrían bajo un plan de protección al testigo... y no confío en él, hyung, tú tampoco deberías hacerlo. Con gente como él, nunca se sabe.

ㅡ ¿A qué te refieres con 'gente como él'? ㅡ Minho frunció el ceño, confuso.

ㅡ No te olvides de quién es. Sigue siendo responsable de la muerte de Felix.

ㅡ ...¿Y tú?, eres un asesino en serie, ¿debería confiar en ti?

Hyunjin lo miró, volvió a acercarse a Minho, pasó con delicadeza sus dedos por su mejilla y tomó su mentón con la misma mano, mirando los labios del pelinegro, y luego sus ojos, clavando como estacas sus orbes oscuros en los del mayor.

ㅡ No, tampoco deberías amarme, pero lo haces... ¿por qué eso te importa ahora? ㅡ Lee guardó silencio, bajó la cabeza, incapaz de sostenerle la mirada al rubio. ㅡ Y si tuviéramos que juzgarnos por quién tiene las manos manchadas de sangre, tampoco te salvas, hyung.

Hyunjin se alejó y terminó de meter el cuerpo inconsciente de Changbin dentro de la maleta. Por último, tomó su máscara y se la puso, acercándose a la puerta.

ㅡ Recuerda quién eres también, Minho. ㅡ Hwang abrió la puerta y desapareció, junto con su mejor amigo.

Minho quedó solo, otra vez. Quedó aturdido un momento, y una vez que volvió en sí, tomó los platos con comida y comenzó a arrojarlos sobre el suelo, empujó la mesa, las sillas, con furia, gritando, aprovechando ese momento para desquitarse.
Finalmente se acercó a una pared, respiró varias veces, intentando tomar fuerzas, y luego golpeó fuertemente su cabeza contra la superficie, cayendo inconsciente.

. . .


La detective tomaba nota, el pelinegro tenía la vista perdida mientras se encontraba recostado en la camilla del hospital.

ㅡ Retomemos una vez más lo que me cuentas, Minho. Este hombre entró a tu departamento mientras tú y Seo Changbin almorzaban, los atacó, a ambos los golpeó en la cabeza, y cuando despertaste, Seo ya no estaba en el departamento, se fue sin dejar rastro, pero una maleta de su pertenencia desapareció con él.

ㅡ Eso fue lo que pasó.

ㅡ Bien... las cámaras de seguridad del edificio, extrañamente dejaron de funcionar una hora antes de que ocurriera el ataque, y volvieron a funcionar exactamente después del suceso. Sin embargo, una cámara de una tienda frente al edificio pudo captar a un sospechoso saliendo con la maleta, propiedad de Seo Changbin, y enmascarado. ¿Podrías describir las características físicas del hombre?, lo que recuerdes es de mucha ayuda.

ㅡ Alto, tal vez un metro ochenta, era tonificado, pero tenía esa máscara... apenas le veía el rostro, sólo los labios y la nariz.

ㅡ ¿Algún tatuaje, piercing, pudiste notar el color de cabello o alguna cicatriz?

ㅡ Nada... lo siento.

Jihyo terminó de anotar cada descripción y datos que le había proporcionado Minho. Finalmente, suspiró y apagó la grabadora.

ㅡ Gracias, Min, y lamento tener que molestarte con esto, siento que ya lo hice lo suficiente...

ㅡ No hay problema, siempre estoy dispuesto a ayudar... y mucho más ahora, sabe que Changbin es mi mejor amigo, hasta podría fácilmente decir que el único que tengo.

ㅡ Lo entiendo, Min, vamos a hacer todo lo posible por encontrarlo.

ㅡ Muchas gracias...

La detective se levantó del asiento junto a la camilla de hospital. Tomó sus pertenencias y se dirigió a la puerta, pero antes de salir, frenó en seco, volteando lentamente en dirección al más joven para hacerle una última pregunta.

ㅡ Por cierto... tú conociste de muy cerca a Hyunjin, ¿crees que exista la posibilidad de que el hombre que te atacó y secuestró a Changbin no sea él?

ㅡ La verdad, no lo creo. Si realmente hubiese sido él, estoy seguro de que lo hubiese reconocido, además, se supone que está muerto hace ya un tiempo.

ㅡ Comprendo... bien, entonces nos veremos pronto, Minho, descansa y recupérate, cualquier cosa que necesites, tienes mi número.

La detective salió por la puerta, Minho observó a su alrededor, los pensamientos en su cabeza no se callaban.

"Recuerda quién eres también, Minho"
Y ciertamente, no lo sabía. ¿Un asesino? ¿así como Hyunjin? no lo quería creer, no podía creerlo... tal vez era hasta peor que él.

Sacudió su cabeza, intento salir de esas ideas que su mente le daba, arrepintiéndose al segundo porque una fuerte jaqueca y un mareo lo invadió al hacerlo. No debía ser brusco con sus movimintos, ahora lo sabía.

Poco después entró un doctor, le dio una extensa charla sobre su diagnóstico y los cuidados que debía tener, y posteriormente, le dio el alta médica.

Minho salió del lugar, caminó por unas horas, y se detuvo frente a una casa. Tocó la puerta, inseguro, pero lo hizo.

Una pelinegra de unos veinticinco años abrió la puerta y lo miró sorprendida.

ㅡ ¿Minho? ¿qué haces aquí? son las once de la noche.

ㅡ Soojin, ¿puedo pasar la noche aquí?... sinceramente, no tengo dónde ir.

Soojin no dudó demasiado y abrió completamente la puerta, dándole el suficiente espacio al contrario para que pudiera entrar.

𝘴 𝘢 𝘯 𝘨 𝘳 𝘦  𝘥 𝘦  𝘧 𝘦 𝘭 𝘪 𝘯 𝘰 ☆ 🄷🅈🅄🄽🄺🄽🄾🅆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora