Corpse Husband [[CHESTAPPEN ]]

Los Muertos Y Los Vivos

Al darse cuenta de que los muertos vivientes no quieren hacerles daño, los vivos gradualmente se acercan reconociendo a seres queridos que habían fallecido a lo largo del tiempo, muchos recibiendo a los allegados con felicidad por poder verlos una vez más. Es cuando Charles sale de la mansión y logra escuchar una pequeña conversación que lo deja perplejo.

— Aléjense! Ni crean que me matarán del susto- gritaba una mujer mayor moviendo su andadera en el aire para ahuyentar a los muertos — Atrás! Les daré una tremenda paliza! — continuó amenazando.

—Mi amorcito!— dijo un esqueleto que recibió algunos golpes de la mujer — Cielito!-

—Atrevido!— gritó ella.

—!Gertrudis!-

—¿Alfred?— preguntó al parecer lo había reconocido —Llevas muerto más de quince años - mencionó

Él la acercó para abrazarla.

—Y aún así querida no te eh olvidado — confesó besándola.

Charles se enterneció por la escena de aquella pareja, él deseaba haber tenido lo mismo con su amado.

—¿Qué haces aquí, mi amor? — escuchó cuestionar de parte de la mujer

—Vengo por una boda! Checo, un jóven que conocí en el mundo de los muertos encontró al amor de su vida, a quien lo hace sentir tan especial como yo me sentí contigo, ahora así como nosotros piensan unirse en matrimonio, todos nor dirigíamos a su boda, ¿Te gustaría acompañarme? — dijo el hombre muerto.

—Claro que sí querido—

Con ello ambos emprendieron viaje al destino original de su visita al mundo de los vivos, Charles los siguió por curiosidad, algo dentro de él le decía que Max tenía algo que ver en todo eso, estaba tan inmerso en sus pensamientos que no se dió cuenta que alguien más lo seguía. Habían pasado años que no escuchaba aquel apodo, no podía ser cierto, siguió a su "marido", tenía que comprobarlo.

[...]

Ya con todos en la iglesia, Cristian Horner se encontraba en el altar para oficiar la boda. Sergio y Max se unen a él. Horner hojea su libro.

-Queridos mortales y muertos, estamos reunidos hoy para unir a estos jóvenes en matrimonio. Ahora los votos. El mortal primero.

Max respiran profundamente. Esto ya no era el bosque, ni ninguna práctica.

-Con esta mano yo sostendré tus anhelos. Tu copa nunca estará vacía, porque yo seré tu vino.

Cristian asintió hacia el novio cadáver indicando que era su turno.

-Con esta mano yo sostendré tus anhelos. Tu copa nunca estará vacía, porque yo seré tu vino.

Todo se sintió tan natural al tratarse de Sergio. Como si ya se conocieran.

-Con esta vela, yo alumbraré tu camino en la oscuridad.- continuó Max

Checo sintió su pecho inflarse en pura y rebosante felicidad, tanta que no cabía en sí.

-Y con este anillo, te pido que seas mío.

Nuevamente, el pedazo de oro se deslizó por el dedo de Sergio y el salón no tardó en llenarse de gritos, silvidos y aplausos por parte de todos cuando ambos se besaron y fundieron en un cálido abrazo.

-¡No griten! Es una iglesia— se escuchó por ahí.

-Para culminar con esta sagrada unión, Max Verstappen, debes beber el vino sagrado -continuó Horner.

Sujetó la copa, y sin una pizca de miedo, la llevó a sus labios.

-Alto!!!— interrumpió alguien en la sala.

—¿Charles?—