Mi corazón es para ti ｡⁠♡

'capitulo 9'

Narrador

Rusia se fue a las 7 AM de la prisión, tenía demasiado sueño y le pidió a Alemania venir antes de su tiempo.

A demás, la actividad física que había hecho en la celda de México le acabó sus energías más pronto.

Fue Alemania quien llevó a México a bañarse. Caminó hasta la celda. Hacía tiempo que no miraba al mexicano.

—México, hora de levantarse.

Lo que no se esperaba era ver a México ya levantado, y sin camisa ni pantalones.
De por sí estaba confundido con lo que pasaba entre México y su hermano, ahora al verlo así su confusión solo fue en aumento.

—¿Eh? ¿dónde está Rusia? —preguntó México confundido, pero sin ponerse la ropa, vergüenza era algo que no conocía México.

—se tuvo que ir, ¿por qué estás sin ropa?

—yooo, tenía calor

—¿A las 7:00 de la mañana?

—simón, es que los mexicanos somos muy bipolares, cuando hace frío andamos en shorts, y cuando hace calor traemos un chamarrón —se río ligeramente.

—¿Bien...? Camina.

Alemania decidió por el bien de su mentalidad creerle, no quería saber por qué México estaba semidesnudo.

México se puso su ropa y zapatos, ya les había dejado el rencor por lo que pasó la última vez. Comenzó a caminar a un lado de Alemania, así acostumbraba a hacerlo con Rusia, cuando claramente el criminal debía de ir al frente, para evitar que hiciera algo.

Llegaron a las duchas y Alemania se pasó hasta adentro con él. Se quitó la ropa junto con el boxer y se metió a una de las regaderas de al fondo.

En el baño mayormente a parte de bañarse algunos reos lo usaban para tener sexo casual. Ya sean unos simples toques o llegar hasta el final. Si saben a lo que me refiero.

(Mentira, en la mayoría de las prisiones no está permitido hacer actos sexuales, porqué es considerado delito, pero aquí nos vamos a hacer pendejos sjjsjs)

Eso Alemania ya lo sabía, pero cuando entró habían por lo menos 5 parejas que estaban teniendo relaciones sexuales. Muy poca gente tenía vergüenza ahí, habían tanto exhibicionista cómo conservadores que preferían bañarse e irse sin ver a nadie a su alrededor.

Los más tímidos o los nuevos son los que se duchaban en las esquinas, aunque de nada servía ya que las regaderas tenían solo una pared de vidrio que no dejaba nada a la imaginación, solo el vapor ayudaba a tapar un poco.

Y Alemania, que era un adicto a la pornografía se sentía como un pez en el agua. Tendría que buscar una excusa para venir más a menudo.

Pasando los minutos ni cuenta se dió que México había terminado y lo estaba  esperando a su lado. Estaba más concentrado en mirar a dos reos en plena acción.

(Yo sí fuera vato y trabajara de policía XD)

México tosió falsamente para llamar la atención del alemán que parecía muy entretenido mirando porno en vivo.

—¡Ah! ¡México! No sabía que ya habías terminado, ¿nos vamos? —un sonrojo cruzó por sus mejillas. Lo habían cachado estando de morboso, a demás que la obvia erección en sus pantalones lo delataba.

México solo sonrió. En su mente estaba pensando en mil bromas para avergonzar más al alemán. Ese era su don, hacer burla, o "burllyn" cómo le decía él.