Llorar

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A little bit of ZoLu
Esto contiene severos spoilers del arco de Sabaody, Amazon Lily, Impel down y Marineford. Ya te advertí.
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Caminaba con entusiasmo alrededor de todos esos puestos con su algodón de azúcar en mano; Una sonrisa estaba dibujada en su rostro, pues estaban en un hotel marítimo en el que habían desembarcado porque, según Nami, necesitaban un descanso de todas las bestias marinas, todos esos arrogantes piratas y todos esos incansables marines. Y bueno, ninguno se negó. Después de todo, el hotel ofrecía muchas comodidades y diversiones, como el parque acuático, aquel en el que estaban ahora mismo.

De repente, una señora algo mayor y medio rara le llamó.

—¡Oye, chico! —su mirada se dirigió hacia la vieja. Parecía una de esas señoras que, supuestamente, predecían el futuro.

Si me preguntan a mí, eso es brujería.

—¿no quieres saber sobre el misterioso futuro que te espera? —preguntó la anciana, con un toque de intriga que no llamó la atención del azabache, pues le sonrió y negó. —¿seguro? te compraré más de ese dulce que tienes en la mano. —sobornó. Se acercó con una sonrisa, asintiendo con emoción. —ven, acércate, hijo.

La señora le tiró un polvo que le hizo estornudar. Luego murmuró algunas palabras que el chico no entendió y se puso a intentar ver algo en la bola de cristal. Luffy miraba atento, pero sólo podía ver el cristal; en cambio, la señora podía observar lo que el cristal le mostraba. Su mirada cambió a una de terror y comenzó a traducir lo que veía.

—Vas a perder a tus amigos por un señor alto. —comenzó. —Tu amigo peliverde estará al borde de la muerte... —seguía. La sonrisa de Luffy había desaparecido hace unos segundos. —El señor alto te tocará y te llevará lejos, a la isla de las mujeres; Estuvieron a punto de matarte, pero pudiste escapar... —seguía contando. —Te infiltrarás en la prisión Impel Down y armarás un alboroto. Casi mueres por un señor que era veneno, pero nuevamente pudiste escapar... —a medida que iba viendo y contando, sus ojos mostraban más y más temor. —Te unirás a un gyojin azul y a un payaso junto a otros criminales hasta llegar a Marineford y pelear contra la Marina, aliándote a S-Shirohige... —se sorprendió bastante. —Y al parecer morirá en tus brazos un chico de pelo negro con pecas. —terminó de contar. Alzó la mirada al pelinegro.

—Ace... —murmuró.

La anciana lo miró con pena. —Lo siento mucho, ch-

Un llanto fuerte se escuchó por parte del pelinegro, ni siquiera intentaba cubrirlo. La gente comenzó a amontonarse por saber qué le pasaba, y la señora intentaba explicar que tenía un futuro terrible.

Muchos intentaron acercarse para consolarlo, pero no servía, Luffy ni caso les hacía.

Por otro lado, una pelinaranja junto a sus amigos, ajenos al caos que había alrededor, preguntó a unos hombres que hablaban con pena y parecían haber salido de ese escándalo.

—Oigan, muchachos. —llamó su atención. Los hombres voltearon a verla. —¿saben qué está pasando en todo ese alboroto?

Los hombres se miraron con pena y luego uno respondió. —Un muchacho con sombrero de paja fue a ver a la adivina y al parecer se enteró de un futuro terrible que tenía por delante. Lo hizo llorar. —los chicos se miraron entre sí, asustados.

—¿y de casualidad el chico no tenía cabello negro y una cicatriz debajo del ojo izquierdo? —preguntó el de nariz larga. El otro hombre contestó.

—Uh, sí, era exactamente así. Estaba llorando a mares. —agregó.

—Entiendo... —murmuró el rubio, preocupado. —Gracias. —agradeció y los hombres se fueron. —Vamos.

Emprendieron camino hacia la multitud, donde empezaron a meterse hasta llegar al principio.

—¡Luffy-san! —exclamó alarmado el esqueleto al verlo así; se acercó rápidamente junto a todos sus compañeros.

Luffy seguía sin prestar atención a nada, sólo lloraba.

Chopper, al borde del llanto por ver a su capitán energético y alegre de tal manera, se acercó a abrazarlo, rompiendo a llorar junto a él al instante.

—¡¿Qué están viendo?! —exclamó el rubio a los expectantes.

—¡Lárguense! —le siguió el espadachín, enojado.

La gente comenzó a dispersarse cuando los vieron así de enfadados, además de que detrás de ellos había un cyborg. Los dos hombres ya daban miedo de por sí.

Mientras tanto, la arqueóloga se acercó a la anciana.

—Señora-san. —la llamó. —¿qué ha pasado?

Los ojos de la señora se apagaron. —Le pregunté si quería saber si futuro, pero todo salió mal. Lo que le espera al pobre es horrible. —levantó la mirada. —Y tú estuviste en mi visión...

—comprendo... —murmuró. Volteó su mirada a su capitán al cual estaban abrazando. Excepto el espadachín. Lo entendía.

Vio vagamente a Zoro algo alejado gracias a las lágrimas que nublaban su vista. Recordó lo que le dijo la anciana.

De repente, el llanto de Luffy se intensificó, causando preocupar aún más al resto.

Robin se acercó.

—Luffy, ¿qué es lo que tienes? —le seguía preguntando el francotirador. El azabache quería responder, pero no podía.

Nami, en un desesperado intento de hacer que se calme, se dirigió hacia Zoro. —Zoro, tú qué fuiste y eres su primer nakama, y tienes más confianza de la que alguna vez nosotros podamos tener con él ¿podrías acercarte y averiguar qué le pasa?

Obviamente, el espadachín asintió, acercándose junto a ella a su capitán.

—Luffy. —llamó. El azabache dirigió su mirada hacia él y se quedó observándolo antes de lanzarse a abrazarlo. Enredando sus piernas en su cadera y enterrando su rostro en el hueco que había entre su cuello y hombro. Zoro sintió su hombro húmedo y escuchó los sollozos que aún continuaban.

Por otro lado, la anciana junto a todos los mugiwaras, habló. —¿no eres tú el hombre de cabello verde que vi moribundo en mi visión? —todos la observaron. Nami se colocó en frente de ella.

—¡¿qué fue lo que viste?!

La vieja tragó pesado y comenzó a explicarles todo mientras que Zoro frotaba con suavidad la espalda del menor hasta que se durmió.

—Y eso fue todo lo que vi. —terminó. Todos estaban atónitos ante la revelación, mientras que Franky, Chopper y Brook lloraban a mares.

—Entonces por eso Luffy estaba así de deprimido, le dijiste que su hermano moría y que nos perdía a todos. —comentó Usopp, haciendo que la señora se sintiera culpable.

—Eso ya no importa. —intervino Sanji. —Lo mejor será irnos.

Todos estuvieron de acuerdo. Dejaron aquel hotel y fueron al barco, navegando entre la oscuridad de la noche mientras su capitán dormía.

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¿por qué mi cerebro crea tantas escenas donde Luffy llora? ¿es porque me gusta el drama? ¿o porque Luffy casi nunca llora y aprovechando eso quiero hacer drama con eso?

Básicamente, me encanta el drama 👉👈✨

en fin, que difícil ser Navila 😔👊
Adioss!!

One Piece World | ZoLu | O. P.Where stories live. Discover now