ONE SHOTS DE VEGETA Y BULMA

ESE YA NO SOY YO

CUANTO MÁS USO ESTE PODER... NO ME GUSTA.

Sé que con todo este poder en mis manos podría ser más fuerte que... NO!, yo soy más fuerte que Kakarotto con todo este poder... pero para usarlo tengo que volver a ser alguien que prometí no volver a ser...

Bulma: Vegeta estás bien? Te veo más pensativo que de costumbre?
Vegeta: no pasa nada mujer, sólo estoy algo cansado
Bulma: cansado?, ahora si que me has preocupado... qué tienes mi amor

Bulma me conoce demasiado bien como para creerse lo que acabo de decirle... por eso la amo tanto.

Bulma: por favor Vegeta... dime que te ocurre, llevas unos días muy... raro
Vegeta: raro?, no digas tonterías, estoy como siempre
Bulma: eso no es verdad (se acerca a mi y me abraza) desde que volviste de tú último entrenamiento en el planeta de Bills... has estado más callado de lo normal
Vegeta: uhm....
Bulma (acarició con suavidad un lado de mi cara, su mano es tan cálida): dime mi amor, acaso no salió todo bien... acaso no pudiste incrementar más tu poder?

Me quedé mirándola a esos ojos azules en los que soy capaz de perderme mientras ella seguía abrazándome, no sabía cómo decirle lo que me estaba ocurriendo... así que la besé, comencé despacio, suave, pero una vez que empecé... mi cuerpo quería más.

El beso comenzó a ser más intenso, la cogí entre mis brazos y la recoste sobre nuestra cama, quería sentirla, sentir su suave piel acariciando todo mi cuerpo, así que comencé a quitarle ese vestido tan seductor que se había puesto para la cena de gala a la que debía ir y a la que yo había aceptado ir con ella.

Pero en ese instante... mi cuerpo tenía deseos de tomarla y ella debió notarlo porque no se quejó como hacía otras veces, diciendo que llegaríamos tarde y que era algo importante, esta vez ella me desnudo casi más rápido que yo a ella, aunque es cierto que yo apenas había comenzado a vestirme... y tan solo llevaba el bóxer y la camisa.

Recorrió todo mi cuerpo con sus delicadas manos sin dejar de besarme, me dio todo su calor y consiguió que olvidará lo que me pasaba durante ese instante mientras yo me embriagaba de su olor, su olor a fresas que tanto me gusta.

Sé que debo contarle lo que me sucede porque estoy preocupandola, la estoy haciendo sufrir por ello y si hay algo que jamás puedo permitir es que Bulma... sufra.

Bulma: mi amor...
Vegeta: uhm...
Bulma: estás seguro que quieres ir?, puedo pedírselo a nuestro hijo, ya es todo un jovencito de 18 años...
Vegeta: no Bulma, es mi obligación de esposo, Trunks debe cuidar a ese diablillo de 4 años que tiene por hermana (sonrio, no sin dificultad)
Bulma: esta bien (me besa en la mejilla mientras vuelve a comenzar a vestirse)

Durante toda la gala no he podido evitar verla radiante y maravillosa yendo de acá para allá atendiendo a la gente y rechazando bailar con todo aquel que se acercaba a ella, y sé que lo hace por mí y también sé que le gustaría poder bailar conmigo pero... ella sabe que eso sólo ocurrirá cuando todos se vayan.

Vegeta: Bulma...
Bulma: sí Vegeta... quieres qué nos vayamos ya, porqué podemos irnos si quieres...

No era eso lo que quería pero aún así asentí y cuando me disponía a subirme en su coche...

Bulma: no Vegeta
Vegeta: no?
Bulma: quiero ir a otro lugar... puedes llevarme volando... por favor
Vegeta: por supuesto, sólo dime a dónde...
Bulma: a nuestro árbol
Vegeta: oh!... de acuerdo (le conteste mientras veía las lágrimas que estaban a punto de brotar de sus hermosos ojos)

Así que cuando nadie nos veía la cogí entre mis brazos después de ponerle mi chaqueta sobre sus hombros para que no cogiera frío, y puse dirección a aquel lugar donde ella me invitó a su casa, el árbol donde yo estaba apoyado aquel día, no sabía porqué quería ir hoy precisamente a ese lugar...