El sonido de la ciudad de fondo me hizo regresar a mis sentidos.
Mi cuerpo se sentía caliente y mis ojos pesados.
Pasaron los segundos hasta que mi visión se ajustó a la oscuridad de mi refugio.
Respiré hondo el aire frío de la mañana y miré a mi alrededor. Podía sentir el peso de la cabeza de Lili sobre mi regazo, ella aún dormía.
Noté mi PDA en el suelo, apagado, seguramente se quedó sin batería.
Tengo varios paquetes más, pero aún tengo que ser cuidadoso con gastar deliberadamente esas cosas...
Bueno...
Lentamente quité a Lili de mi encima y ella gruñó cuando dejó de tener mi muslo debajo de su cabeza, acomodándose en una bolita y abrazando más fuerte la almohada en sus brazos.
Fue gracioso verla así.
Debería comprar más almohadas...
Me ajusté las botas, recogí mi PDA y lo dejé sobre la mesa.
Bien, creo que ya es hora de hacer ese encargo de piedras mágicas.
Tengo algunas guardadas, pero si quiero ganarme buena reputación con las personas capaces de contrabandear equipo táctico a través de mundos, entonces necesito impresionarlos.
Tal vez podamos probar las aguas en el octavo piso. Mis dos tontos tienen armas de fuego, así que puede que logremos hacerlo... aunque aún necesitan práctica, por lo que tendría que guiarlos.
No debería de ser difícil, dependiendo de qué tanto esten dispuestos a escucharme.
Aunque... no, no debería haber problema con eso.
Sé que ambos confían en mí, por lo que sin duda escucharán y seguirán mis consejos y órdenes.
Son novatos, pero ciertamente no son como los desadaptados que tuve como unidad hace dos años.
Es un maldito milagro que todos hayamos salido con vida luego de estar un mes juntos en la Zona, sin duda una mezcla de suerte con, sonaré algo arrogante, mi habilidad para guiarlos.
Ese mes fue el primero de mi estadía en ese lugar de mierda y sin duda sirvió como una prueba de fuego.
Me pregunto que les habrá pasado...
Que se joda Makarov, pero los demás sí eran... eh, peculiarmente divertidos.
Hacían de ese aburrido lugar algo más pasable.
Cómo sea.
Tomé un paquete de baterías de mi estantería y las intercambié con las gastadas de mi PDA, lo encendí y nuevamente lo dejé sobre mi mesa.
Siendo lo más silencioso que pude, tomé la misma AK-74M de ayer y utilicé mis herramientas para remover la montura junto con la mira y reemplazarla por una retícula PSO-1 encima.
Hoy planeo ser el soporte, me gustaría lograr que Bell y Lili alcancen una buena coordinación de batalla, para luego ajustarme a su estilo una vez lo consigan.
Retraje la culata de la AK-74M y la dejé a un lado, para luego tomar una Saiga-12, una escopeta rusa con la misma capacidad modular que cualquier otra AK-74, por lo que en teoría podría ponerle una PSO-1 y babosas, pero eso sería estúpido.
La usaré en caso las amenazas sean numerosas, ya que es una escopeta semiautomática con un cargador de 5 balas.
Solo le cambié el cuardamanos y le puse una empuñadura debajo del mismo, así como un combo de linterna y láser para desorientar a cualquier monstruo con un rápido flash a los ojos.
ESTÁS LEYENDO
¿Está mal explorar un lugar completamente diferente a la Zona?
FanfictionEl Stalker puede dejar la Zona, pero la Zona no dejará al Stalker. No pensé que esa simple frase tuviera tanta verdad en sus palabras. Después de todo, sea aquí o en otro maldito mundo, la Zona seguirá conmigo. Y, para ser sincero, nunca quise dejar...