MI DIAMANTE CODICIADO ♤ LIBRO 2 ♤

Capítulo 35

GIOVANNA

Giro nuevamente el brazo cuando la indicación de Cartel amenaza si no obedezco.

- Vamos nubecita, necesito que hagas esto bien, si yo no estoy en algún momento y algo te pasa...

Doy un golpe de lleno en el saco de boxeo.

- No digas eso. - expreso sintiendo mi corazón palpitar.

Lo veo apretar con los labios, negando.

- No puedes vivir alejada de la realidad Giovanna, las cosas malas pueden llegar.

Doy otro golpe lastimando mi mano.

- No quiero esas cosas malas en mi vida, así que no hables sobre eso.

- Tengo que hacerlo.

- No.

- Es mi deber que entiendas que no vives en una fantasía donde todo es color de rosas, no, debes vivir sabiendo que puedes perder cosas, personas, pero aún así debes vivir, amando, sobreviviendo otro día más.

- ¡No! - golpeo con más fuerza el saco.

Continuo dando golpes sin escucharlo.

- Giovanna te estoy hablando.

- Y yo no te estoy escuchando.

- Giovanna.

Lo ignoro siguiendo con los movimientos de manos que ya me sé.

- Giovanna, no seas una niña.

- Cállate Cartel.

Lo escucho suspirar, pero no me detengo.

Unos brazos aprietan con fuerza mi abdomen alejándome del saco de boxeo.

Pataleo intentando librarme pero su fuerza claramente me supera.

- No me gusta tu actitud y no soy de callármelo. Así que debes escuchar y obedecer por tu propio bien.

Me siento sudorosa y adolorida. Solo quiero dormir.

- Entiendo que temas, que tú pasado te traiga miedo y por ende no quieras ver la realidad, pero no hay de otra, aquí todos hemos perdido vidas, amigos y familia, tú no eres diferentes a nosotros, por lo que puedes superar de igual manera la perdida de un ser querido.

- Yo lo amaba... - digo casi rota por dentro.

Suspira y yo comienzo a llorar.

Quería decirlo hace mucho.

Desde que besé por primera vez a Cartel.

Quería decirlo en voz alta, quería que entendiera y que yo entendiera que aun lo amo.

Que lo extraño y que solo era él para mí. Lo juro.

Lo juraba.

- Lo amo y él fue a quien escogí...

Se queda quieto mientras yo lloriqueo.

- Solo a él, a su amor, sus caricias, sus besos, sus promesas, yo quería mi vida con él y me la arrebataron.

Entre llantos escucho su respiración pausada.

- No me importa alguien más, yo solo quería eso y...no quiero más maldad en mi vida, no lo merezco...él tampoco lo merecía.

Mis manos arañan los brazos que me sostienen y me mareo.

- Tranquila. Entiendo... - imaginaba el corazón de Cartel quebrarse mientras me escuchaba llorar por Mikael.